La política de “máxima presión” de EE.UU. contra Venezuela golpeará la economía, sin ninguna duda. Tal vez no como en 2019 (porque hay curva de aprendizaje), pero el efecto será el mismo: más sanciones = más deterioro.
El señalamiento es formulado por el economista, articulista y presidente de la firma consultora, Datanálisis, Luis Vicente León, al comentar el panorama al que se enfrentan los venezolanos ante la actual coyuntura.
Advierte que tampoco hay duda sobre las causas fundamentales de la migración venezolana: la crisis económica actual y el temor a que ésta empeore en el futuro. Ambas son intensificadas —no aliviadas— por las sanciones.
La ecuación es clarísima: máxima presión genera deterioro, el deterioro genera crisis y la crisis dispara la migración. Si se amplifica la presión económica, es obvio que más venezolanos querrán irse, y aquellos que regresaron (voluntaria o forzadamente), volverán a intentarlo. Sostener lo contrario es una fantasía, aquí o en Cochinchina. Las encuestas lo confirman:
•20% de los venezolanos considera migrar hoy. ( cinco millones más de personas)
•Casi 70% de ellos lo hace por razones económicas.
•Si la situación mejora, solo el 2% mantendría esa disposición.
•Pero si empeora, el número sube a 31%. ¿Cuál crees que sería la política correcta para combatir la migración? ¿Generar más crisis económica (sin ninguna posibilidad real y creíble de provocar cambios políticos) o ayudar a reducirla?