Para el doctor Juan Vilera, quien desarrolló sus funciones en el Consejo Nacional Electoral y culminó sus gestiones como jefe nacional para eventos regionales, resulta absurdo que ese organismo se haya convertido en un fantasma, que aparece fugazmente y desaparece después de cada proceso electoral.
Después de las elecciones presidenciales del 28 de julio del año pasado, prácticamente, desapareció una vez que su presidente, en transmisión radiotelevisada, apresuradamente y muy nervioso anunció unos resultados contrarios a los que desde muy temprano de la jornada electoral ya conocía la población en general.
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Antes de cumplirse los lapsos para las nuevas elecciones de diputados de la Asamblea Nacional, gobernadores y miembros de los consejos legislativos, sorpresivamente fue hecho el anuncio; pero, inexplicablemente, no se publicó en Gaceta Oficial y más aún, también sin dar explicación alguna, se cambió la fecha para el mes de mayo.
Pero, ninguno de los rectores, ni siquiera el presidente del organismo, han dado a conocer lo relacionado con cronograma y demás procedimientos que se deben cumplir en todo proceso electoral y, en realidad, mantienen un manto de silencio, que evidentemente ocasiona sospechas de que en el organismo electoral están haciendo las cosas como le conviene al gobierno y no están actuando como es lo lógico: en forma transparente, confiable y de acuerdo a las normas, leyes y la Constitución.
La página Web del CNE fue clausurada el propio 28 de julio para impedir que la gente tuviera los resultados comprobables y desde entonces nadie sabe nada de lo que está ocurriendo dentro del mencionado organismo, que trabaja en las sombras y como la imagen que se tiene de los fantasmas, aparece y desaparece, terminó sus declaraciones el doctor Juan Vilera.
