Por: Violeta Villar Liste / www.lawebdelasalud.com
En Venezuela se conmemora el Día del Médico el 10 de marzo, en recuerdo del natalicio del Dr. José María Vargas, médico, científico, catedrático de la Universidad de Caracas y quien fue Presidente del país. A propósito de la fecha, conversamos con el presidente de la Academia Nacional de Medicina (ANM), Dr. Huníades Medina Urbina.
«Las universidades tradicionales con sus facultades de Medicina y escuelas de Medicina y otras relacionada con la salud, mantenemos la calidad de la educación, a pesar de la crisis, adaptándonos a las nuevas realidades del país…«
Un promedio de 26,000 médicos se han marchado de Venezuela; el sistema sanitario se mantiene en emergencia compleja y desde el 2016 el Ministerio de Salud no ofrece cifras de morbimortalidad.
Sin embargo, en medio de la adversidad, la comunidad médica venezolana que hoy celebra su día, intenta, en el país, y con la solidaridad de colegas en el exterior, mantener la calidad de la educación y de la asistencia sanitaria.
En el caso de la Academia Nacional de Medicina (ANM) de Venezuela, sus palabras no naufragan en la indiferencia: el país respeta a una institución que levanta su voz para advertir y orientar y cuyo papel en el contexto de la pandemia de COVID-19 que cumple cinco años, resultó vital para acompañar a la población en sus decisiones.
El Dr. Huníades Urbina Medina, presidente de la ANM, se declara optimista contra todo pronóstico y la lucha por la salud del venezolano mantiene su vitalidad.
A propósito del Día del Médico en Venezuela, este 10 de marzo, natalicio del Dr. José María Vargas, médico, científico, catedrático de la Universidad de Caracas y quien fue presidente de Venezuela, conversamos con el presidente de la ANM, sobre los logros y desafíos de la corporación que representa a la ciencia médica nacional.
Siempre a la orden al servicio del país
-¿Ha logrado la ANM cumplir con su papel de asesor y guía para acompañar las mejores decisiones en el fortalecimiento del sistema de salud de Venezuela?
-Lamentablemente no hemos podido cumplir con el aspecto que dicta la Ley Orgánica que nos creó: el de ser asesores con los entes rectores de la salud, puesto que desde los últimos 20 años no hemos sido consultados para los planes de salud poblacional, sin embargo, en cada comunicado público que hacemos para informar a la comunidad, dejamos por escrito que estamos siempre a la orden para trabajar en los diferentes proyectos que tengan a bien convocarnos.
-¿Cuáles han sido las estrategias para acompañar al venezolano en el contexto de la emergencia humanitaria compleja?
-La estrategia es «salir» de los espacios del Palacio de las Academias e ir a las comunidades con atención directa y educativa, para lograr que hablemos el mismo idioma y así poder lograr un diálogo constructivo en pro de la comunidad.
-¿Cómo ha permitido el trabajo colaborativo con otras corporaciones definir respuestas a la realidad médica y sanitaria del país?
-A través de incorporación de nuevos miembros correspondientes nacionales e internacionales, invitados de cortesía, además de los Individuos de Número, apoyando los trabajos de campo que generen conocimiento y cifras para conocer la realidad de muchas comunidades y tener un diagnóstico por lo menos parcial, dado que el MPPS desde 2016 no publica cifras de morbimortalidad.
Educación centrada en el estudiante
-¿Cuál es el papel que está desempeñado la universidad venezolana y, en concreto, las facultades de Medicina?
-Las universidades tradicionales con sus facultades de Medicina y escuelas de Medicina y otras relacionada con la salud, mantenemos la calidad de la educación, a pesar de la crisis, adaptándonos a las nuevas realidades del país, particularmente la Universidad Central de Venezuela (UCV) donde me desempeño como profesor de la Escuela de Medicina Vargas.
Por mandato del rector de la UCV, Dr. Víctor Rago, estamos ajustando la malla curricular y cambiando los objetivos por competencias de los estudiantes, con una educación centrada en el alumno a la par de otras universidades a nivel internacional.
-¿Tienen cifras actuales con relación a la matrícula estudiantil y del número de médicos que se han marchado del país?
-De acuerdo con la Federación Médica Venezolana, el 40% de los médicos del país han emigrado, un promedio de 26,000, lo cual impacta en el número de profesores activos, por lo cual el decano de la Facultad de Medicina, Dr. Mario Patiño, y su equipo, se ha apoyado en los profesores invitados, tanto nacionales e internacionales, para colaborar con la docencia. La matrícula de las universidades ha disminuido en 30% aproximadamente, sin embargo de las carreras de las facultades Médicas o de Ciencias de la Salud, la carrera de Medicina sigue siendo de las más solicitadas.
-¿Cuáles iniciativas originales están en marcha para dar respuestas a la realidad sanitaria del país?
-Como Academia Nacional de Medicina, en calidad de asesora, no tenemos injerencia directa en los planes de salud , ya que somos solo asesores. La implementación de los planes de salud corresponde a políticas de Estado, sobre los cuales podríamos tener participación en caso de ser consultados. Nos corresponde mantener la educación médica continua, educación a la comunidad y acción solidaria con las comunidades en conjunto con apoyo de empresas privadas y ONGs y las sociedades científicas.
Lograr una mejor salud
–En medio de la desesperanza, la esperanza: ¿qué mantiene intacta su alegría, su entusiasmo y ganas de seguir adelante?
-Me mantiene activo y con ganas de seguir trabajando por el país, la esperanza de lograr una Venezuela mejor, con educación de calidad, viviendas dignas sin cobro político, una población sana, con salud universal, gratuita y de calidad, y a pesar de las críticas y las adversidades internas como externas, mantener el intento de lograr una Academia actualizada, acorde con los tiempos y desde este y cualquier otro escenario, mantenerme fiel a mis convicciones: lograr una mejor salud para todo el pueblo venezolano, aunque suene a discurso trillado, pero es así.
