La icónica imagen del Cristo Redentor, en lo alto del cerro Corcovado en Río de Janeiro, Brasil, se iluminó la noche del jueves con el rostro del Papa Francisco y palabras de apoyo en diversas lenguas.
Esta proyección, organizada por la Arquidiócesis de Río de Janeiro en colaboración con la aplicación católica Hallow, buscó unir a la comunidad global en oración por la salud del pontífice, quien lleva 14 días hospitalizado debido a una neumonía bilateral.
El gesto simbólico, visible desde distintos puntos de la ciudad, se convirtió en un llamado a la solidaridad de los mil 400 millones de fieles en el mundo. «Toda la Iglesia del Brasil está unida en oración por la salud del Papa Francisco», declaró para medios brasileños el cardenal Orani João Tempesta, arzobispo de Río, quien pidió a los creyentes sumarse espiritualmente a la petición por la pronta recuperación del pontífice argentino.
Brasil ha dado diversas muestras de apoyo a Francisco desde que fue hospitalizado el pasado 14 de febrero por una bronquitis con infección polimicrobiana a la que se sumó una neumonía bilateral.
Papa Francisco cumple dos semanas hospitalizado
El papa Francisco cumplió este viernes dos semanas hospitalizado recuperándose de una neumonía, mientras los médicos sugerían que había superado la fase más crítica de la infección, aunque se abstuvieron de afirmar que estaba completamente fuera de peligro.
El Vaticano, sin embargo, hizo planes alternativos para el Miércoles de Ceniza, dejando claro que el papa tiene todavía una larga recuperación por delante. El cardenal Angelo De Donatis, funcionario del Vaticano y antes vicario de Roma, presidirá la ceremonia el 5 de marzo y la procesión que da inicio a la Cuaresma previo a la Semana Santa en abril.
El parte ofrecido por el Vaticano a primera hora del viernes también sugirió normalidad y rutina, ya que el pontífice argentino, 88 años, continúa recuperándose en el Hospital Gemelli de Roma. “Como en días anteriores, la noche fue tranquila y el papa ahora está descansando”, explicó.
Los doctores afirmaron en su reporte el jueves por la tarde que el estado clínico de Francisco confirmó una mejoría. Estaba alternando el oxígeno suplementario de alto flujo que recibía a través de un tubo nasal con una máscara, lo que indica una mejor función respiratoria. Además, salió de su habitación para ir a su capilla privada cercana para rezar y seguía con la fisioterapia respiratoria y el trabajo, informó el Vaticano.
Por segundo día consecutivo, los médicos evitaron decir que Francisco estaba en estado crítico, sugiriendo que había superado la fase más grave de la infección. Pero ante la complejidad de su infección pulmonar, apuntaron que “se necesitan más días de estabilidad clínica” antes de revisar oficialmente su pronóstico y decir que está fuera de peligro.