Un persistente bote de aguas negras en la intersección de la avenida Argimiro Bracamonte con avenida Venezuela, en Barquisimeto, ha generado un grave deterioro de la capa asfáltica, dificultando el tránsito de vehículos y peatones en un importante tramo vial.
El rayado peatonal comprende el sector más afectado de la intersección, con profundos y numerosos huecos desbordados por las aguas negras. Además, en esta área también se encuentra la salida de una reconocida estación de servicio, lo que agrava el congestionamiento en el semáforo.
Conductores lamentan estado de la vialidad
Un conductor dijo a El Impulso que el bote de aguas negras afecta este tramo vial desde hace un tiempo considerable, razón por la que ha causado graves daños al asfalto, sin embargo. precisó que en los últimos dos meses se ha intensificado y se ha vuelto más constante.
“Pasar por aquí en moto es más difícil que en carro”, dijo un motorizado, quien explicó que los motorizados deben evitar el agua residual acumulada en el pavimento, tomando precauciones para evitar accidentes por las inclinaciones del asfalto y los huecos profundos que encuentran en la intersección.
La situación se agrava con el tiempo, a medida que el agua continúa socavando la base de la vía. Los conductores se ven obligados a realizar maniobras peligrosas para evitar los obstáculos, lo que aumenta el riesgo de colisiones y otros accidentes.
Colas de gasolina
Alberto Rodríguez, conductor de un vehículo de transporte público, señaló que este bote afecta a los usuarios que surten combustible en la estación de servicio ubicada en la avenida Bracamonte con Venezuela, pues deben soportar fétidos olores y sortear los charcos, mientras hacen la cola para surtir combustible en la estación de servicio más cercana.
Además, destacó la contaminación que ocasiona el bote de aguas negras en las proximidades, como en los locales comerciales que se encuentran en la estación de servicio.
El deterioro de la vía no solo afecta a los conductores, sino también a los peatones, quienes deben sortear los obstáculos y el agua estancada para transitar por la zona. La situación genera congestionamiento vehicular y afecta la calidad de vida de los residentes y comerciantes del sector, quienes deben lidiar con los problemas de salubridad y el mal olor que emanan las aguas negras.
