Aproximadamente 1000 familias que habitan en el sector 2 del barrio Santo Domingo, parroquia Concepción, municipio Iribarren, estado Lara, llevan 11 años de espera por la construcción de un pozo de agua que acabará con la escasez de ese líquido en la comunidad.
Así lo expresa Antonia Mendoza, luchadora social de la citada comunidad, tras asegurar que en el 2024, en obra conjunta Gobernación e Hidrolara, se comenzó la construcción de la obra, no obstante, al poco tiempo se paralizaron las excavaciones y nadie ofrece una explicación al respecto, pese a que solo faltan detalles para su conclusión.
Mendoza dice que fueron 11 años de lucha para conseguir que los entes gubernamentales aprobaran el presupuesto de la obra, a fin de que a esas 1000 familias les llegue agua por tubería a sus hogares. «No podemos seguir cancelando cinco dólares para llenar un tanque de agua todas las semanas», comentó.
La vecina asegura que se duchan arriba de un tobo para poder recoger el agua, reciclarla y usarla para los baños. Cuando llueve recogen agua y la utilizan para bañarse, lavar, incluso para su consumo.
La líder social precisa que hay personas que no cuentan con los recursos para comprar agua todas las semanas y se han visto en la obligación de recolectar agua del Río Turbio, lo que les ha generado enfermedades en la piel e incluso malestares estomacales que han tenido que ser atendidos en ambulatorios.
Mendoza, en nombre de la comunidad, hizo un llamado a los entes competentes para que reanuden este proyecto que sería de gran beneficio para las familias del sector.