Diversos sectores de la sociedad larense se sienten conmovidos por el dolor y el pesar que ha causado la noticia del sensible fallecimiento del empresario José Gerardo Mendoza, quien destacó en diversas actividades económicas y en el ámbito cultural larense.
Con su novela El niño que venció la montaña, este extraordinario hombre relató su vida desde su nacimiento en un apartado caserío en una zona montañosa del ahora municipio Jiménez hasta el momento en que decidió conquistar el medio urbano.
Primero se vino a Barquisimeto, luego de lo cual buscó probar suerte en Caracas y desde la capital se trasladó a El Tigre, en el oriente del país, y cuando regresó a Lara ya pudo empinarse en el mundo empresarial. Montó negocios no sólo en Lara sino en Portuguesa en el área automotriz y también desplegó actividad en el sector agropecuario, así como en otras áreas, proyectando sus inversiones más allá de nuestras fronteras e instaló empresas en Asia.
Al mismo tiempo se desempeñó como un destacado dirigente gremial y hasta promovió actividades deportivas. Se caracterizó además por dar a conocer su pensamiento en escritos que le publicó El Impulso en la sección Reflexiones en Positivo, que posteriormente seleccionó para la edición de un libro, que no solo contiene análisis de todo tipo sino que resulta un ideario para las nuevas generaciones.
Encarnó el espíritu de superación, la inteligencia creativa y la perseverancia
Yo fui prologuista de dos libros de José Gerardo Mendoza. De su novela El niño que venció la montaña y de la compilación de sus Reflexiones en Positivo, dijo el doctor Marco Tulio Mendoza, expresidente de la Sociedad Venezolana de Psiquiatría y docente de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado.
El niño que venció la montaña es una visión novelada de la significación de salir del campo al medio urbano y llegar a la cúspide del éxito, quien triunfó fuera de nuestras fronteras como empresario.
José Gerardo encarna el espíritu de superación, la inteligencia creativa y la perseverancia de lo que son los buenos oficios y las grandes virtudes, para conseguir no sólo el reconocimiento nacional, sino haber sido representante permanente de diferentes instituciones gremiales económicas y hasta deportivas.
José Gerardo tenía una necesidad imperiosa de estar en todas partes, donde había que estar para la discusión, porque él iba a recibir conocimientos y aportar sabiduría. Se podía encontrar en discusiones de eventos científicos y participaba con su visión muy humilde, pero con la certeza de que aportaba cosas interesantes e importantes.
Su deceso nos llena de profundo dolor y luto porque fue una persona sumamente importante y trascendente para nuestra sociedad, concluyó sus palabras el doctor Mendoza.
Fue un hombre íntegro, honesto, responsable, emprendedor y optimista
Pablo José Chirinos, expresidente de Fedecámaras Lara, expresidente de la Cámara de Comercio del estado Lara y expresidente de la Cámara Ferretera del estado Lara, dijo estar muy entristecido al conocer la infausta noticia.
Manifestó que José Gerardo Mendoza fue un larense y, por supuesto, un venezolano íntegro, honesto, trabajador, responsable, emprendedor y optimista, que además dejó páginas escritas que constituyen ejemplo de reflexiones sobre las personas, el país y el futuro de las nuevas generaciones.
Fue un dirigente gremial de altos quilates, afirmó. Como persona tuvo gran sensibilidad humana y estuvo siempre al lado de los desposeídos.
Lo conocí, traté y compartí con él responsabilidades gremiales. Y fue ejemplo de lo que es un emprendedor con éxito, porque supo instalar negocios en diferentes áreas, por supuesto, con el norte del éxito que siempre le estuvo guiando. Y supo también vencer las adversidades con sabiduría, paciencia y tenacidad.
Nunca se amilanó ante la necesidad de empezar de nuevo, sin importar el tiempo y las circunstancias, porque todavía a la edad que tenía pensaba en que había que trabajar afanosamente por este país y por el bienestar de toda la gente. El tiempo para él no era una limitante porque entendía y hacía saber que no podemos perder un instante para avanzar y superar las dificultades cuando éstas se presenten.
Es por ello que su muerte la lamentamos todos, porque estuvo en muchas actividades, hizo muchos amigos y también fue un emocionante ejemplo para las nuevas generaciones, porque siempre tuvo un espíritu juvenil a pesar del avance de los años.
Demostración de esfuerzo, dedicación y perseverancia
Maximiliano Pérez, dirigente nacional de los caficultores y vocero de la Red de Instituciones Larenses, considera que para la sociedad barquisimetana, en particular; y la larense, en general, la muerte de José Gerardo Mendoza es motivo de profundo pesar.
La partida física del niño que venció la montaña, para lograr con esfuerzo propio, dedicación permanente a la actividad económica, la preocupación por la sociedad venezolana y el impulso que le dio a la inversión, constituye una pérdida muy importante no sólo para esta región sino para todo el país, dijo nuestro entrevistado.
José Gerardo Mendoza fue la demostración de la perseverancia, el optimismo y la razón para alcanzar el éxito en todas las actividades que desarrolló. Además de ser un hombre insigne en su proceder personal y familiar, nos hizo pensar en lo que significa destruir el pesimismo y encaminarnos hacia senderos de luz y optimismo, a través de reflexiones en positivo. Su pensamiento se mantiene vigente y será una iluminación para los jóvenes que lean su libro.
Fue directivo de la Federación Nacional de Ganaderos, de la Cámara de Comercio del estado Lara, de Fedecámaras, de la Asociación de Escritores del estado Lara e insigne figura de la Red de Instituciones Larenses.
El Impulso al registrar esta nota de condolencia, hace llegar su más sentida y sincera palabra de condolencia a su señora esposa, señora María Auxiliadora Rodríguez de Mendoza y a sus hijos Yajaira, Belkis, Gerado José y Alberto Mendoza Pérez; y a Alberto y Andrés Mendoza Rodríguez. Que Dios, nuestro Señor, lo acoja en su seno.