La fe y la tradición se fusionaron una vez más en las calles de Barquisimeto con la visita número 167 de la Divina Pastora. Desde tempranas horas de la mañana, miles de devotos se congregaron en el Santuario de Santa Rosa para acompañar a la patrona de los larenses en su recorrido hacia la Catedral.
Nuestro equipo de reporteros se trasladó hasta el Arco de Santa Rosa para captar la emoción de los fieles. Allí, conversamos con Luzana Ovalle y su familia, quienes nos compartieron su profunda devoción a la Virgen. “Esto es algo que hacemos en familia desde hace muchos años”, expresó Luzana. “Le pedimos a la Divina Pastora, sobre todo, salud y unión familiar”.
Por su parte, María del Rosario Sandrón, una fiel devota proveniente de Sanare, aseguró que a pesar de las dificultades, no faltaba a esta cita anual. “Tengo muchísima fe en ella y espero que me cure de todo lo que me aqueja”, afirmó. Sandrón también reveló estar cumpliendo una promesa a la Virgen, un gesto que refleja la intensidad de su devoción.
La procesión, que se extendió por varios kilómetros, fue una muestra de la arraigada tradición religiosa de los larenses. Familias enteras, amigos y comunidades se unieron para acompañar a la Divina Pastora en su recorrido.
El equipo de El Impulso continuará informando sobre los detalles de esta emotiva celebración, que se ha convertido en una de las manifestaciones de fe más importantes de Venezuela.