Durante un recorrido por la principal vía comercial de Barquisimeto, el bulevar de la 20, un equipo del diario EL IMPULSO efectuó ayer un recorrido para observar si los cuerpos de seguridad desplegados allí implementaban el operativo para mantener a esta importante arteria peatonal libre de comerciantes informales, en vista que desde el viernes pasado se había reportado un gran número de ellos en la zona.
A media mañana y a lo largo del trecho que se extiende entre las calles 24 y 28 que atraviesan la conocida avenida, se avistaron muy pocos buhoneros, algunos de los cuales vendían alimentos y otros, prendas de vestir. Aunque ninguno de ellos de encontraba en las vías adyacentes.
También fue posible indagar con algunos empleados en establecimientos comerciales del sector, para determinar con cuál frecuencia se presentaban los buhoneros, y respondieron que sólo suelen colocar sus tarantines cuando están seguros de que no se encuentra ningún efectivo de la Guardia Nacional Bolivariana o de la Policía Municipal de Iribarren en los alrededores.
“No es común verlos un día y usualmente no se aparecen tan temprano por la mañana, prefieren hacerlo cerca del mediodía”, señaló un vendedor que trabaja en un quincallería, quien prefirió no ser identificado.
Cabe destacar que no se notó una presencia adecuada de funcionarios de la GNB u algún cuerpo policial, durante el recorrido. Sin embargo, fue posible ubicar a dos efectivos castrenses que caminaban por el bulevar, a quienes se le preguntó cómo marchaba el operativo para evitar que los buhoneros se volvieran a instalar en la avenida 20. Al respecto, uno de ellos confirmó que seguía en marcha y que especialmente los fines de semana era cuando el movimiento buhoneril se incrementaba significativamente, por lo cual el trabajo de los cuerpos de seguridad era más intenso durante esos días, en cumplimiento de la ordenanza emitida por la Alcaldía de Iribarren para garantizar el despeje del bulevar y la seguridad de compradores y comerciantes.
Por lo demás, se observó una gran cantidad de peatones caminando por la avenida y ningún vehículo estacionado de manera ilegal en la misma. Asimismo, la jornada comercial de todos los establecimientos en el sector parecía transcurrir con normalidad.
Es necesario recordar que el mayor Wilmer Pifano, jefe de la Policía Municipal, había informado el martes pasado durante un encuentro con los medios de comunicación, que los comerciantes de la economía informal que laboraban en el centro de Barquisimeto serían desalojados tal y como estaba establecido en la ordenanza municipal emitida por la Alcaldía de Iribarren.
Si bien el máximo jefe de la policía local no detalló entonces cuándo se cumpliría el plazo para el desalojo, sí explicó que se había sostenido una reunión con representantes de la economía informal que suelen ubicarse en la carrera 22 con calle 26, de donde habían sido desalojados la semana anterior por un grupo de funcionarios.