Con un total de una Danta y 11 crías de Boas tornasol, cierra la tasa de natalidad del mes de abril en el Pulmón Vegetal de Barquisimeto, parque Zoológico y Botánico Bararida, reafirmando la labor de reproducción y éxitos en el cuidado de las especies autóctonas venezolanas.
El pasado cinco de abril en horas de la madrugada, nace en la zona criolla, una cría hembra de danta, hija de Ezequiel y Shama, siendo la quinta cría de esta fértil pareja, quienes han incrementado su familia en los años 2007 (Maikuri), 2008 (Dinira), 2010 (Saesaera) y 2012 (Guazú).
El tiempo de gestación de esta especie es de 13 a 14 meses, la jefa de la división de salud y Manejo Animal del parque Bararida, Myredi Brazao, acotó que, “desde diciembre se venía haciendo seguimiento a Shama por su aumento de volumen y comportamiento dentro del ambiente donde se encuentra”
Esta especie mística de hábitos alimenticios herbívoros, está protegida por encontrarse en peligro de extinción por la caza indiscriminada y beneficios lucrativos por su piel y carne.
Serpentario de fiesta
11 crías de sus boas tornasol, con su maravilloso efecto iridiscente, forman parte de la familia del serpentario Sebastián de los Reyes, el cual se encuentra a cargo de los Guardaparques Universitarios que hacen vida en el parque Bararida.
El coordinador de este recinto, Carlos Vargas, explicó que, “estas crías son el reflejo de las óptimas condiciones en que se encuentran los ejemplares del serpentario en cautiverio”
Asimismo, dio a conocer que durarán en periodo de observación durante 15 días, para evaluar su compartimiento y evolución, de igual manera a cumplir este tiempo consumirán sus primeros alimentos, como pequeñas especies de roedores o insectos; los cuales incentivarán su instinto de caza.
Sobre las crías, algunas de ellas estarán exhibidas en sus ambientes para que los visitantes puedan observan este tipo de especie nacidas en cautiverio, y el resto serán trasladados a otros serpentarios a nivel nacional de ser requerido.
Foto: Archivo
