El británico Mark Cavendish (Omega Pharma) ganó en el esprint la primera etapa del Giro de Italia, con salida y meta en Nápoli (sur), y se enfundó la maglia rosa de líder.
Cavendish se impuso al italiano Elia Viviani y al campeón de Francia Nacer Bouhanni, al frente de un pelotón fraccionado por una caída en los últimos metros.
En tanto, los venezolanos Jackson Rodríguez y Tomás Gil, fichas del Androni de Gianni Savio, quedaron relegados de la lucha por la etapa, pero cumplieron el cometido de llegar al sitio de meta con el mismo tiempo del vencedor.
Para el campeón del Mundo 2011 (Cavendish) es la undécima victoria de etapa en la ronda italiana, y vuelve a vestir el maillot rosa que llevó dos días en 2009 y uno en 2011. El esprinter de la isla de Man logra además con éste el octavo triunfo de la temporada.
El alemán Danilo Hondo fue el cuarto en esta etapa inaugural de 130 kilómetros, disputada alrededor de Nápoles. El italiano Giacomo Nizzolo fue quinto y el australiano Matthew Goss sexto.
“Vine aquí para ganar esprints y he empezado la carrera como quería”, dijo Cavendish, que subió al podio con su hija, el bebé Delilah.
“He sufrido bastante, pero la distancia de la etapa, 130 kilómetros, ha ayudado a concentrarse en la victoria”, declaró Cavendish, de 27 años, que corre este año su quinto Giro.
La etapa inaugural de esta edición 90, disputada con un tiempo soleado, consistía en dos circuitos, uno de 16,4 km con una pequeña subida, que se recorrió cuatro veces, y un segundo de ocho kilómetros al que se le dieron ocho vueltas.
La carrera estuvo marcada por una escapada en el primer cuarto de hora. Más adelante, el australiano Cameron Wurf (Cannondale) logró desgajarse de sus seis compañeros de aventura (Giovanni Visconti, Guillaume Bonnafond, Martijn Keizer, Marco Canola, Ricardo Mestre, Brian Bulgac).
Los escapados llegaron a tener dos minutos de ventaja, una distancia que no fue a más gracias al ritmo impuesto por los equipos de esprinters Omega Pharma (Cavendish) y Argos. Finalmente el australiano fue absorbido por la serpiente multicolor a 12 kilómetros de meta.
Sin embargo, el equipo Cannondale no dejó de dar guerra en la última parte de la etapa.
Con un fuerte ataque, la escudería del esprinter Elia Viviani estiró un pelotón que en el último kilómetro se vio cortado por una caída, dejando en cabeza a un grupetto de poco más de diez corredores.
El australiano Matthew Goss se posicionó bien a la rueda de su lanzador, pero en los últimos 200 metros Cavendish llegó disparado desde atrás para imponerse en la meta a un frustrado Viviani.
“El equipo ha hecho hoy un trabajo extraordinario; hemos conducido el pelotón desde el principio y no hemos cometido errores. Sólo ha habido problemas en la recta final, cuando (Gert) Steegmans tuvo un problema mecánico”, comentó Cavendish al término de la etapa.
“Hubo un agujero y me vi encerrado por los corredores del RadioShack, así que tuve que tomar la iniciativa. He hecho un esfuerzo enorme y he ido hasta el límite para ganar”, añadió.
La segunda etapa, este domingo, será una contrarreloj por equipos de 17,4 kilómetros en la isla de Ischia, enfrente de Nápoles. Los tiempos serán calculados sobre el quinto corredor de cada escuadra.