La presidenta de Perú, Dina Boluarte, reveló que el Ejecutivo de ese país está preparando una serie de ajustes destinados a regularizar la situación de los migrantes venezolanos. Estas medidas incluyen la exigencia de contratos de trabajo y de alquiler, así como un monitoreo exhaustivo sobre el envío de divisas fuera de Perú, con el objetivo de combatir el crimen organizado.
Durante su primera conferencia de prensa en más de 100 días, Boluarte enfatizó la necesidad de rastrear el origen de los ingresos de aquellos que envían remesas al exterior. «Vamos a hacerle seguimiento a las divisas y remesas que se mandan fuera del país, para saber de dónde generan esos ingresos. Y aquel que no responda de manera cierta de dónde son sus ingresos, pues ahí les vamos a caer«, afirmó la mandataria en un balance de su gestión durante los últimos ocho meses.
Boluarte explicó que los ajustes en Migraciones requerirán que cada migrante venezolano presente documentación que acredite su situación laboral y de vivienda. «Pedimos a los propietarios de inmuebles que tengan cuidado de a quienes alquilan sus viviendas», advirtió, señalando la colaboración con la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) para controlar el cumplimiento de estas nuevas regulaciones.
En su discurso, la presidenta también abordó la creciente ola de extorsión y crimen organizado que afecta al país, asegurando que se tomarán medidas severas contra los delincuentes extranjeros. «A los delincuentes extranjeros que están en nuestro país, a ellos les decimos, los botaremos del territorio nacional. No les vamos a permitir que se queden un día más en nuestro territorio», declaró la presidenta de Perú.
La mandataria destacó que el éxodo de casi 9 millones de venezolanos, está impactando a naciones de todo el mundo. «Hemos visto un éxodo que no se ha visto desde la época de Moisés», agregó. Boluarte también reflexionó sobre la política migratoria de administraciones anteriores, que mantuvieron las fronteras abiertas sin una regulación adecuada frente al aumento de la delincuencia.