La creciente brecha entre el dólar paralelo y el oficial en Venezuela continúa generando incertidumbre en la economía nacional, debido al alza que han sufrido en estas últimas semanas.
Según expertos consultados, esta disparidad se debe principalmente a la alta demanda de divisas por parte de la población, que busca resguardar su poder adquisitivo ante la persistente inflación. Liuba Malpica, economista y profesora universitaria, explicó que «el dólar paralelo es una respuesta a las dificultades de acceso a divisas y al deterioro del bolívar como moneda de intercambio».
La economista destacó que el Estado venezolano, como principal proveedor de dólares, fija un tipo de cambio oficial que no siempre satisface la demanda del mercado. «La diferencia entre uno y otro radica en que el dólar paralelo es el resultado de la oferta y la demanda de los ciudadanos», afirmó Malpica.
Por su parte, Rosben Romero, presidente del Colegio de Licenciados en Administración del estado Lara, señaló que las empresas venezolanas se enfrentan a constantes ajustes en sus estructuras de costos debido a la volatilidad del tipo de cambio. «La brecha cambiaria genera un impacto significativo en las organizaciones, que deben adaptarse constantemente a nuevas condiciones», indicó Romero.
¿Qué se espera a futuro?
Los especialistas coinciden en que la estabilidad de la brecha cambiaria dependerá en gran medida de las políticas económicas implementadas por el gobierno venezolano. Un aumento en la oferta de dólares por parte del Banco Central de Venezuela podría contribuir a reducir la presión sobre el tipo de cambio paralelo.
Sin embargo, la incertidumbre económica y la falta de confianza en la moneda local continúan siendo factores que alimentan la demanda de divisas y mantienen la brecha cambiaria en niveles elevados.