La clasificación al mundial de Emiratos Árabes fue “un paso importante”, pero la ambición de la aguerrida selección sub17 de Venezuela está intacta y la meta es trascender, tal como ocurrió en el reciente Suramericano, sin tenerle miedo a los rivales de mayor historia y con más recorrido.
“No hemos logrado nada, esto fue apenas un paso, un escalón que subimos”, señaló Joseph Cañas, preparador físico del elenco nacional, al encabezar una rueda de prensa realizada en el aeropuerto Jacinto Lara de Barquisimeto, poco después del arribo, ayer en horas de la mañana, de algunos jugadores e integrantes del cuerpo técnico.
Junto con Cañas, merideño de nacimiento y colaborador de su padre en Yaracuyanos, llegaron los jugadores Franko Díaz (capitán), José Luis Marrufo, Ronaldo Peña y Douglas Martínez, además de Luis Jiménez, preparador de porteros y José Quintero, coordinador general.
Cañas, determinante en su rol de preparador físico, indicó que al mundial sub17 (noviembre), indicó que en el mundial la idea es “competir” y tratar de emular lo hecho en suelo argentino, cuando llegaron con intención de obtener el pasaje a la máxima cita y terminaron por pelear el título con Argentina, el anfitrión del evento.
“Ya dejamos de ser cenicienta, nos respetan, nos hemos hecho un nombre y eso es reflejo del crecimiento”, indicó el hijo de Alí Cañas, entrenador venezolano que en 2006 acudió al mundial de Alemania 2006 como asistente de Ratomir Dujkovic en la selección de Ghana.
El colaborador de Dudamel indicó que fue clave la madurez de los jugadores para manejar situaciones adversas, como en el último partido, cuando lograron empatar pese a tener dos menos en cancha.
