Pedir a la comunidad internacional detener las violaciones al derecho de asilo y a defender los derechos humanos de los emigrantes, acordó el exalcalde de Caracas Antonio Ledezma.
En efecto, el dirigente político dio declaraciones en el aeropuerto Adolfo Suárez, Madrid-Barajas, luego de que el sábado 5 de octubre España acogiera a un grupo de venezolanos deportados desde Islandia, que les negó las solicitudes de asilo.
Desde el 2023, el gobierno de Islandia ha deportado a venezolanos que han optado por refugiarse en España, como ocurrió el pasado 13 de agosto cuando un grupo de 60 venezolanos arribaron al aeropuerto de Madrid.
Según denuncias de activistas, los primeros venezolanos deportados de Islandia, en noviembre de 2023, sufrieron tratos denigrantes por parte de las autoridades que les confiscaron sus pasaportes y dinero.
Otro grupo de 180 venezolanos arribó a su país el 16 de noviembre de 2023 procedente de Islandia que también les negó sus solicitudes de asilo.
De acuerdo con información de la Oficina de Inmigración de Islandia, cerca de 1.500 venezolanos corren el riesgo de ser deportados de esa nación insular nórdica.
Ledezma pidió a la comunidad internacional detener las violaciones al derecho de asilo y a defender los derechos humanos de la población migrante en cuanto a trabajo, salud, educación, vivienda y recreación entre otros beneficios sociales.
El exalcalde metropolitano de Caracas, escritor y dirigente político, huyó de Venezuela el 17 de noviembre de 2017 y pidió asilo político a España el 24 de noviembre de ese mismo año.
Según datos recientes de la agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), 7,7 millones de habitantes han salido del territorio venezolano.
El país que más migrantes venezolanos ha acogido es Colombia con 2,8 millones, según la Organización Internacional de Migraciones. Le sigue Perú con 1,5 millones venezolanos; Ecuador con más de medio millón.
Estados Unidos, Chile y España ocupan la cuarta, quinta y sexta posición respectivamente. La presencia de venezolanos en España es la cuarta comunidad extranjera que supera el medio millón de personas por detrás de marroquíes, colombianos y rumanos.
