La paz interior comienza al momento en que tú eliges no permitir que otra persona o evento controle tus emociones, palabras que no tiene fecha de vencimiento y en esto deberían estar de acuerdo todos los seres humanos por aquello de que la ética como madre de todas las virtudes, personalidad, sentimiento, amor y sus buenas y nobles costumbres no son producto mercantil y deben de ser el principal elemento para alimentar un espíritu noble y digno, ejemplo de enseñanza a los que vienen atrás y ansiosos de una buena advertencia para no ser sumisos, conformistas a los que otros digan y piensen por él y a la vez estar pendiente de sus deberes y derechos como buenos ciudadanos que se ocupan de digno trabajo en ser un valor agregado por su buena voluntad y creatividad, donde les toque laborar en cualquiera que sea su profesión lo hagan con amor, porque si se sienten cómodos en su trabajo lo toma como su mejor aliado y parte de la familia que es lo que uno ama más en la vida, por supuesto que por desgracia hay hijos que odian a sus padres, cosas que no se entiende, pero así es la vida y nunca sabremos porque la vida es así.
El filósofo Dio Sáez dejó un mensaje que debía de tener vigencia permanente y dice así “El juego del miedo para dominar rebaños social se ve todos los días y pocos logran darse cuenta de ellos” por el bien de toda la humanidad esto debía no estar en la mente de ninguna persona que piense en la paz y una patria hermosa donde reine la armonía, la paz, el bienestar general, el deseo de ser exitoso por medio del trabajo y los comportamientos positivos que marquen la pauta del desarrollo integral y el bien para todos, dando una lección de buen ciudadano a los agoreros, a los flautista portadores de lo negativo, que dejen de angustiar y preocupar a la gente que se ocupan del trabajo honesto, productivo como es el caso de la agricultura, la ganadería, por nombrar dos rubros por ser estos los que tienen el sagrado trabajo de producir alimentos sin preguntar quién los consume, ni color, ni religión, ni a qué partido político pertenecen, solo trabajo y contribución y el deseo de ser parte de la solución y la paz y bienestar para que nuestro país brille en el mundo por la paz y prosperidad, se sabe que la ley es la razón si no es afectado por la pasión política.
Ahora más que nunca el campo es la solución, unidos todos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país.
José Gerardo Mendoza Durán