En un giro inesperado en la administración pública venezolana, el gobierno de Nicolás Maduro dio un ultimátum a sus empleados para que abandonen WhatsApp y adopten Telegram como su nueva plataforma de comunicación oficial.
Esta decisión fue comunicada poco después de que Maduro instara a sus seguidores a eliminar WhatsApp, acusando a la aplicación propiedad de Meta de ser utilizada para amenazar al país y su institucionalidad.
Una empleada pública, quien solicitó anonimato por temor a represalias, expresó su desconcierto al tener que adaptarse a la nueva aplicación.
“No sé cómo funciona esta aplicación. La descargué y estoy perdida. Además, no la siento confiable porque comenzaron a escribirme, muchas personas apenas la instalé, pero esa fue la orden que nos dieron”, comentó.
La orden llegó después del 28J
La orden llegó justo después de la controversia electoral del 28 de julio, cuando el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó a Nicolás Maduro como ganador de las elecciones presidenciales, resultado ampliamente cuestionado por la oposición.
El cambio abrupto a Telegram se implementó sin mayores explicaciones para los empleados, quienes han acatado la directiva sin cuestionarla.
En la misma línea, otra trabajadora de una institución estatal también reportó que, al llegar a su oficina el 6 de agosto, se encontró con que todos los colegas estaban ya en Telegram.
Los grupos de WhatsApp se habían trasladado a la nueva aplicación. Aunque ella ya tenía Telegram instalada, su uso previo había sido mínimo.
La rápida transición hacia Telegram genera inquietud entre los empleados, quienes deben adaptarse a una nueva herramienta en medio de un ambiente laboral ya cargado de tensiones.
La decisión del gobierno parece estar motivada por una mezcla de consideraciones políticas y de seguridad.
«Todos te mandaban a descargar Telegram y decían que los grupos serían por esa misma aplicación. A algunos compañeros les notificaron que debían eliminar WhatsApp en los próximos días, pero a mí no me lo exigieron. De hecho, lo seguimos usando, pero poco», explicó al equipo de El Pitazo.
En un contexto en el que en la administración de Maduro busca controlar las comunicaciones y limitar el acceso a plataformas que considera subversivas.
La imposición de Telegram como la única vía de comunicación oficial sigue el patrón de medidas restrictivas y centralizadoras implementadas por la administración de Maduro, en un intento por consolidar el control sobre la información y las redes sociales en Venezuela.
Con información de Runrunes.