Los habitantes de la calle Anacoco, en la urbanización Fundalara, al este de Barquisimeto, denuncian que llevan al menos dos años lidiando con un bote de aguas servidas en un colector ubicado frente a la Iglesia Sagrado Corazón de Jesús. La situación se ha agravado en las últimas semanas, a pesar de que trabajadores de Hidrolara intentaron solucionarlo.
Según los vecinos, el origen del problema se encuentra en un colector de aguas servidas cercano al estacionamiento del Centro de Coordinación Policial Fundalara. A pesar de que hace dos semanas personal de Hidrolara acudió al lugar para realizar las reparaciones, la situación empeoró, generando un mayor caudal de aguas residuales en la calle.
«Hace dos semanas vinieron a destapar, pero parece que lo dañaron más porque comenzó a botar más agua», denunció Mario Heredia, residente de la zona. «No estaba así, vinieron a medio solventar y parece que rompieron el tubo del agua».
Los vecinos expresan su preocupación por la falta de una solución definitiva al problema, ya que los olores nauseabundos son cada vez más intensos, especialmente en las tardes. Además, temen que la acumulación de aguas servidas en la vía pueda provoque enfermedades en los habitantes.
«Esperamos que Hidrolara tome cartas en el asunto y solucione este problema de una vez por todas», afirmó otro vecino. «No podemos seguir viviendo así, los olores son insoportables y representa un riesgo para nuestra salud».