La liebre de California, también conocida como Lepus californicus, es una especie de mamífero perteneciente a la familia Leporidae. Este ágil y veloz animal es un ícono de los paisajes abiertos del oeste de Estados Unidos y México, y es conocido por su capacidad para adaptarse a una variedad de hábitats, desde desiertos hasta praderas y chaparrales.
Es una de las liebres más grandes de Norteamérica. Posee un cuerpo robusto y extremidades largas, especialmente las patas traseras, que le permiten alcanzar velocidades impresionantes, cuando necesita huir de depredadores.
Su pelaje es de color marrón grisáceo con una mezcla de tonos negros, lo que le proporciona un excelente camuflaje en su entorno natural. La cara, el pecho y el vientre son más claros, mientras que sus orejas largas y negras son una característica distintiva que la ayuda a regular su temperatura corporal y a captar sonidos lejanos.
Su capacidad para sobrevivir en condiciones extremas se debe en gran parte a su dieta variada y su habilidad para encontrar alimento y agua en entornos donde otros animales podrían no sobrevivir.
La liebre de California es más activa durante el amanecer y el atardecer. Durante el día, tiende a descansar en madrigueras poco profundas o a la sombra de arbustos y rocas para protegerse del calor extremo. Su dieta es principalmente herbívora y se compone de una amplia variedad de plantas, incluyendo hierbas, hojas, brotes, cortezas y, en ocasiones, cactus. Esta dieta variada le proporciona los nutrientes necesarios y le permite sobrevivir en hábitats con recursos limitados.
La reproducción de esta liebre de California es prolífica. Las hembras pueden tener varias camadas al año, con un período de gestación de aproximadamente 41 a 47 días. Cada camada puede contener de uno a cinco lebratos (nombre de las crías de la liebre), que nacen completamente desarrollados, con los ojos abiertos y el cuerpo cubierto de pelaje. Los lebratos son independientes a las pocas semanas de vida, lo que les permite una rápida integración en su entorno y una alta tasa de supervivencia.
En la cultura popular, las liebres a menudo simbolizan la astucia, por su supervivencia y manera de alejarse de los depredadores; y la fertilidad y la renovación debido a su alta tasa de reproducción.