Los vecinos de Andrés Eloy Blanco, al oeste de la ciudad, lamentan que el terreno ubicado frente a las torres El Sisal, sea utilizado para arrojar escombros de esa construcción así como provenientes de particulares.
Se trata del mismo espacio en el cual llevan a cabo el mercado popular El Obelisco. Esa extensión de tierra permanece abarrotada no solo de los residuos que deja la construcción sino de basura y animales muertos. Es una fetidez constante la que se respira en ese lugar.
La insalubridad no se aguanta. Lo peor del caso, es que las autoridades notificadas del asunto no hacen nada para preservar el buen ambiente y dar tranquilidad a los residentes. Belisario Pérez, habitante, declaró que los consejos comunales del ámbito han solicitado al Instituto Municipal del Aseo Urbano (Imaubar) una jornada especial de limpieza pero hasta los momentos no ha ocurrido.
Ni siquiera mejora el servicio del aseo urbano en los alrededores. En las inmediaciones del Hospital Pastor Oropeza, del Seguro Social, abunda la basura a pesar del daño que pudiera generar la contaminación del ambiente a los numerosos pacientes que acuden al lugar.
Caos de vehículos
La entrada de emergencias del Hospital Pastor Oropeza, ubicado en la avenida La Salle, entre las intersecciones de Las Industrias y Florencio Jiménez, se mantiene congestionada de vehículos particulares y unidades del transporte público.
Hace falta la colaboración inmediata de los fiscales de tránsito a fin de facilitar el acceso de los pacientes. Además, es importante destacar que en la calle frente al seguro sucede lo mismo: “rapiditos” estacionados a lo largo del día, hacen del tránsito automotor un verdadero caos en las horas “picos”. No hay respeto por el transeúnte, sin importar si es una persona de la tercera edad o adultos con niños. Corren el riesgo de ser arrollados por la conducta irresponsable de algunos profesionales del volante.
Los vecinos de ese tramo también exponen sus quejas debido a que impiden estacionarse frente a sus casas o guardar los vehículos en el garaje. “Los taxistas se agarran la calle para ellos nada más”.