El Gobierno de Chile decidió llamar a consultas a su embajador en Venezuela, luego de que el canciller de la administración de Maduro, Yván Gil, desconociera la existencia del Tren de Aragua, una organización criminal trasnacional.
El presidente Gabriel Boric informó la decisión de llamar a consultas a su embajador Jaime Gazmuri, en un acto público de su gobierno. En el que calificó como “irresponsables” y “preocupantes” las declaraciones de Yván Gil, al negar el accionar de una organización a la que Boric atribuye el aumento de la inseguridad en su territorio.
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Declaraciones de Yván Gil insultan a las víctimas
Boric afirmó que las declaraciones del diplomático venezolano constituyen un grave insulto a quienes han sido víctimas de esta organización y además, demuestran una falta de compromiso con la cooperación internacional en materia de seguridad.
En el mismo sentido, Boric rechazó la inoperancia de la administración de Maduro en asuntos de seguridad con los países del sur, de los cuales no admite expulsión de sus ciudadanos que cometen delitos en territorios latinoamericanos, pero sí las acepta de los Estados Unidos, criticó.
Decisión de llamar a consultas a su embajador
El presidente chileno destacó que la decisión de llamar a consultas a su embajador en Venezuela “tiene como objeto poder recabar información detallada sobre la situación actual en el país y evaluar todas las medidas que sean necesarias para proteger los intereses y la seguridad de nuestros ciudadanos y de quienes habitan nuestra patria”, así como, “instruirle al embajador todas las acciones que sean necesarias tanto ante el gobierno venezolano como también eventualmente ante organismos internacionales”.
El canciller venezolano Yván Gil, aseguró en un encuentro con su homólogo colombiano, Luis Gilberto Murillo, que el Tren de Aragua “es una ficción creada por la mediática internacional para tratar de crear una etiqueta inexistente”, que buscaría desacreditar el gentilicio y al gobierno venezolano.
