Este sábado, el diputado Lorenzo Monasterios reveló parte del contenido de una carta firmada por el exmagistrado del Tribunal Supremo de Justicia Eladio Aponte Aponte, a quien se le acusa de haber mantenido nexos con el supuesto narcotraficante Walid Makled, a quien habría entregado una credencial diplomática para facilitar negociaciones turbias.
Este sábado, el diputado Lorenzo Monasterios reveló parte del contenido de una carta firmada por el exmagistrado del Tribunal Supremo de Justicia Eladio Aponte Aponte, a quien se le acusa de haber mantenido nexos con el supuesto narcotraficante Walid Makled, a quien habría entregado una credencial diplomática para facilitar negociaciones turbias.
En el contenido de la misiva, de fecha 16 de abril de 2012, refiere lo siguiente, en palabras de Aponte Aponte:
“Tuve conocimiento del caso del excandidato presidencial Manuel Rosales Guerrero, venezolano (…), asilado político desde abril del 2009, ya que la presidenta del TSJ, doctora Luisa Estela Morales, nos ordenó en el año 2008, impulsar una investigación al exgobernador del estado Zulia y atender directamente las directrices que gire la Fiscalía General de la República, sobre hechos ya estructurados por este órgano, donde se le imputan actos de corrupción en la gobernación de dicho estado. Sin prueba alguna, se le acusa de apropiación de varios millones de dólares. Se nos dijo que ya la Contraloría General de la República al mando del doctor Clodosbaldo Russián, tenía todo adelantado, que resultó ser un sinfín de falsedades”.
Continúa el exmagistrado diciendo que la presidenta del TSJ “nos ordenó esta actuación aduciendo que era una orden del presidente Hugo Chávez, quien habría dicho textualmente: ‘tienen que meter preso a Manuel Rosales. Una calaña como esa tiene que estar en prisión, no gobernando un estado. No puede estar suelto y ustedes tienen que asumir esa responsabilidad’”.
Luego de ello, refiere la carta del exmagistrado, “se desató un clima de terror que amenazaba constantemente si no se tomaba la decisión contra Rosales, y se dijo que si no existía caso penal tendría que inventarse y en el momento que se archivó la causa se ordenó reabrirla inmediatamente, y así se procedió”.
Hace constar, igualmente, que “debido a la presión ejercida se obligó al tribunal 19 de control del área metropolitana de Caracas para que procediera en consecuencia con un expediente (número 19-C12022-09) donde no existía ninguna prueba evidente de hechos de corrupción, que fue revisado por mi persona”.
Para el diputado Lorenzo Monasterios, vocero del partido Un Nuevo Tiempo y de la Mesa de la Unidad Democrática de Lara, esta nueva revelación del exmagistrado pone una vez en evidencia la vulnerabilidad y contaminación del Poder Judicial venezolano, además de la inocencia del excandidato presidencial Manuel Rosales.
“En su momento, cuando Rosales fue impulsado a huir del país, lo apoyamos porque sabíamos que aquí no sería juzgado en el marco del respeto a sus derechos constitucionales”, puntualizó Lorenzo Monasterios.
Foto: Simón Alberto Orellana
