Para que el transporte público pueda continuar prestando su servicio a los usuarios, se debe indexar y ajustar la tarifa, ya que es la única manera que pueda seguir rodando, asegura José Luis Trocel, miembro del comando intergremial del sector Transporte.
Trocel ratifica que la situación actual del transporte público en Venezuela enfrenta áreas y variables políticas complejas, pero asegura que los transportistas, harán sus mejores esfuerzos para que dichos cuellos de botella se superen y se resuelvan efectivamente los problemas.
“Construir soluciones inteligentes, en un ambiente hostil, casi negativo no resulta fácil, pero no hacerlo significa tomar la decisión de cambiar de actividad empresarial y laboral, tenemos el parque automotor más envejecido de la región, actualmente no hay opciones de financiamiento para resolver este problema, esto no es lo que los transportistas en Venezuela queremos y aspiramos que, se resuelvan los problemas en provecho de todo el país”, asegura.
Recuerda que el ingreso de los operadores privados del transporte público está ligado a el precio de la tarifa (relacionado con la: inflación, depreciación del Bolívar, dolarización de hecho de la economía), al volumen de pasajeros que pueden usar el transporte público, directamente relacionado con a la capacidad económica de los usuarios para cancelar por el servicio requerido, está limitado por la disponibilidad de combustibles para poder trabajar, y en paralelo es necesario disponer de la capacidad económica suficiente para garantizar el mantenimiento, operatividad de las unidades, y por supuesto, en Venezuela hay que, desarrollar habilidades de negociación para lograr las metas y objetivos que el gremio se plantee, señaló que, la indexación de las tarifas del transporte público, permitiría garantizar en alguna medida la sustentabilidad de servicio del transporte público.
Asimismo destaca Trocel, que quien más necesita usar el Transporte público es aquél que menos capacidad tiene para pagarlo, el estado tiene la responsabilidad de implementar políticas que, permitan a ese 70% de la población que no posee vehículo propio garantizar sus derechos a la movilidad y a disponer de un transporte de calidad, debe atender con políticas públicas eficaces el desarrollo de planes que impliquen modernizar el transporte y la movilidad en el país, por esto reactivar la economía es imprescindible y sí ella no ocurre el juego se tranca.
Destaca que factores políticos y económicos gravitan negativamente y dificultan la sustentabilidad, desarrollo del transporte público en Venezuela. Sostiene asimismo, que él país llegó a tener uno de los mejores sistema de transporte público en América Latina, en la década de los 80, el sistema Metro en sus modalidades superficial y subterránea eran ejemplo a seguir en la región, el parque automotor del transporte público, con pocas excepciones, estaba en modo de modernización y actualización constante. Recuerda que la industria automotriz venezolana tenía un alto nivel de competitividad y era una fuente permanente de generación de empleos e ingresos. Ciertamente Venezuela es otra y son distintos los contextos políticos y económicos, pero los planes de bienestar y desarrollo del país no pueden dejarse de lado.
Denuncia que el pasado 23 de enero, algunos transportistas fueron contratados en el Área Metropolitana de Caracas para hacer su trabajo, movilizar pasajeros, pero argumentando razones fútiles, dichas unidades de transporte público fueron retenidas y hasta la fecha no han sido liberadas, en los días siguientes hubo contratación masiva de ellas para la realización de actos proselitistas con otra orientación política y sí hubieran utilizado los mismos argumentos todas estas unidades privadas, debieron haber sido retenidas y ello no ocurrió, está discrecionalidad institucional y jurídica es uno de los cuellos de botella que, es necesario superar.
José Luis Trocel solicita una reunión urgente con Pdvsa y los representantes gremiales del transporte público para atender y resolver los problemas que a ambos afectan.