Los narcogenerales venezolanos y otros altos cargos implicados en el tráfico de droga podrían estar preparando un gran lavado de dinero, ante la posibilidad de la quiebra del régimen chavista, con la emisión de bonos por valor de 3.000 millones de dólares anunciada a última hora de este viernes por PDVSA, la petrolera nacional.
Las objeciones contra esa emisión puestas directamente al presidente Hugo Chávez por el ministro de Finanzas, Jorge Giordani, sugieren que el objetivo de la emisión debe ser otro que el interés financiero del Estado, de acuerdo con las quejas de Giordani, conocidas por ABC.
Las revelaciones del fugado magistrado, Eladio Aponte, sobre la implicación en el narcotráfico de altos mandos del chavismo, con la connivencia del propio Chávez, pueden haber acelerado los planes para intentar blanquear fondos procedentes de la droga.
El proceso de declaraciones de Aponte a la DEA, la agencia estadounidense antidrogas, acaba de concluir en Washington. A partir de ahí, la DEA comenzará a elaborar las previsibles resoluciones de acusación contra las figuras más destacadas del régimen. El exjuez ha aportado «abundante información», según confirmaron el miércoles fuentes de la DEA a la agencia AP.
Las sospechas sobre la emisión de bonos de PDVSA, una vía posiblemente ya utilizada antes para el blanqueo de dinero pero que esta vez sería usada a gran escala, se derivan de la sorpresa expresada privadamente por el ministro de Finanzas sobre una salida a los mercados que él desconocía. Dado el volumen y peso de la petrolera en la economía nacional una operación de este tipo es algo que siempre se coordina con su ministerio.
Además, Giordani, a quien no se le relaciona con negocios criminales como ocurre con otros integrantes del Gobierno, es miembro de la Junta de PDVSA. El presidente de la compañía y ministro de Energía, Rafael Ramírez, había dicho públicamente que no estaba planteada una operación de deuda este año, después de que el año pasado ingresara 11.000 millones de dólares por bonos y contara con una aportación de crédito chino por valor de 14.000 millones.
Se enteró por la prensa
Entre las quejas del titular de Finanzas, según ha podido saber este periódico de altas posiciones del Ejecutivo, está la falta de coordinación en la política de endeudamiento. Giordani lamenta haber conocido por la prensa nacional el anuncio de la emisión y considera que ir ahora a los mercados es innecesario.
Para el ministro, en estos momentos existe suficiente liquidez interna y además es prioritario reducir el nivel de deuda. Giordani trasladó esas ideas a Chávez a principios de esta última semana cuando trascendió extraoficialmente que PDVSA iba a llevar a cabo esa emisión, realizable en dólares pagaderos en bolívares, con vencimiento a largo plazo.
De acuerdo con la primera filtración en agencias económicas como Reuters y Bloomberg, la emisión iba a anunciarse el pasado lunes, pero la intervención de Giordani trastocó ese calendario. La comunicación oficial no se hizo hasta última hora del viernes. Entre sus especifidades se indica un cupón de 9,75%.
Si Giordani, alguien con gran ascendencia sobre Chávez, no ha podido parar la emisión, al menos ha conseguido modificar algún cambio en las condiciones. Después de que en un primer momento trascendiera que la operación iba a realizarse mediante banca privada, el ministro insistió a Chávez que tenía que hacerse a través de bancos públicos, como finalmente es el caso.
