La actividad comercial parecía retornar lentamente a la normalidad mientras que las clases en las escuelas seguían a nivel virtual el lunes, casi una semana después del inicio del “conflicto armado interno” decretado por el gobierno para enfrentar la espiral de violencia generada por el crimen organizado.
Hace una semana, el presidente Daniel Noboa decretó estado de excepción restringiendo algunos derechos como la libertad de reunión y movilización, junto a un toque de queda. Un día después declaró el estado de “conflicto armado interno” que faculta a las fuerzas armadas a enfrentar a las bandas criminales, vinculadas especialmente con el narcotráfico.
El fin de semana, 169 funcionarios penitenciarios que permanecían retenidos en siete cárceles del Ecuador fueron liberados en su totalidad, confirmó el presidente Noboa. Uno de los agentes falleció en una prisión del sur del país.
De acuerdo con el más reciente balance de las autoridades durante el estado de excepción al menos 1.327 personas han sido detenidos, 143 de ellos por presunto terrorismo, además, cinco miembros de las bandas han sido abatidos, aunque no se ha precisado si son parte de los 14 fallecidos reportados en la ciudad de Guayaquil.