El conflicto bélico entre Israel y el grupo armado Hamás que inició el pasado sábado ha dejado al menos 2.300 bajas en ambos lados, miles de heridos, desplazados y desaparecidos, entre ellos, rehenes israelíes y extranjeros tomados por los terroristas.
El ejército de Israel informó que las cifras oficiales estiman 1.200 fallecidos y más de 2.700 heridos, como consecuencia de los ataques de las milicias palestinas, que además han ocasionado la evacuación y el desplazamiento de los habitantes de zonas donde ocurrieron las incursiones.
Por parte de Gaza, el Ministerio de Sanidad señaló que la represalia israelí ha dejado un saldo de 1.100 muertos y 5.339 heridos, mientras que la ONU precisó que la cifra de desplazados asciende a 264.000, la mayoría se ha refugiado en instalaciones de la organización, tales como escuelas.
La organización también informó que once trabajadores de la agencia para refugiados palestinos (UNRWA) perdieron la vida durante la represalia israelí sobre la Franja de Gaza, a los que se suman cinco miembros de la Cruz Roja y la Media Luna Roja.
Los gobiernos de otros países han informado sobre la pérdida de sus ciudadanos en medio de la confrontación, como el caso de 22 estadounidenses, 22 filipinos, y una estudiante de Portugal de 25 años que a pesar de sobrevivir al ataque en el festival de música donde los militantes masacraron alrededor de 260 personas, fue encontrada sin vida este martes.
A la lista también se suman 7 argentinos, una ciudadana chilena-israelí que fue asesinada en el Kibutz Ain Hashloshá, la ciudadana hispana-israelí Maya Villalobos, que prestaba servicio en una base militar cerca de la frontera, además de 17 británicos y 18 tailandeses.
De la misma forma, ciudadanos de todos los continentes han presenciado y sufrido el estallido de la guerra entre Israel y los militantes de Hamás, algunos han solicitado protección en las instalaciones diplomáticas de sus países en Tel Aviv, otros han sido secuestrados y trasladados a tierras palestinas.
Hamás ha secuestrado al menos 150 personas y amenaza con asesinar un rehén en cada ataque de Israel.