Un pueblo que pide libertad, justicia, paz, esperanza, prosperidad y un mejor porvenir para Venezuela y sus ciudadanos; ha sido la mayor súplica de los peregrinos en la decimoséptima Marcha de la Fe a realizarse en el municipio Torres este sábado 30 de septiembre.
Monseñor Carlos Curiel Herrera, Obispo de la Diócesis de Carora, expresó que como pueblo de Dios “nos encontramos caminando juntos y en medio; la Virgen María bajo la advocación del Rosario de Chiquinquirá que al caminar junto a nosotros nos llena de amor y esperanza de una Venezuela mejor, más fraterna, más humana”.
“Estoy pidiendo por Venezuela ciertamente, y estoy pidiendo por los venezolanos para que seamos capaces de seguir, animados y esperanzados en construir un país, y que Dios nos siga acompañando”, enfatizó el presbítero Ernesto Camacho, rector del santuario en Aregue.
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La religiosa Sulmary Linares, de la Congregación de las Hermanitas de Los Pobres, luego de 3 años de servicio en el Hospital San Antonio y en la Casa Hogar San José, comentó a El Impulso que por primera vez hace el recorrido mariano de la localidad para agradecer su permanencia en la ciudad, mientras pide a la Virgen que interceda por “nuestra patria Venezuela y todas las personas que han salido del país”.
En tanto, Javier Oropeza, alcalde del municipio Torres, enfatizó que le pide a la Virgen por una país de “libertad y democracia; y que una a todas las familias venezolanas”.
Sin duda alguna, el deseo de los ciudadanos por una mejor calidad de vida para los venezolanos que están dentro o fuera del país sigue siendo la mayor petición que hacen día a día ante la madre de Dios en sus distintas advocaciones.
