Alrededor de 170 migrantes que fueron rescatados en el Océano Atlántico han estado atrapados a bordo de un barco de la Guardia Civil española durante días cerca de la nación de Mauritania, en el noroeste de África, luego que las autoridades no les permitieron desembarcar, según medios españoles.
El Ministerio del Interior de España se negó este lunes a proporcionar detalles del incidente, pero en un correo electrónico dijo confiar que la situación se solucionará en las próximas horas para las 168 personas rescatadas.
El diario español El País publicó que la Guardia Civil rescató a los migrantes el jueves 24 de agosto a unos 150 kilómetros (80 millas náuticas) de la costa de Mauritania y agregó que se cree que los inmigrantes son senegaleses.
La Guardia Civil es uno de los dos cuerpos policiales nacionales de España. Durante años, ha trabajado con autoridades locales en Mauritania y Senegal para tratar de impedir que los migrantes lleguen a las Islas Canarias de España, un archipiélago en el Océano Atlántico frente a la costa noroeste de África.
En los últimos meses se ha registrado una oleada de inmigrantes que parten de Senegal y navegan hacia el norte pasando por Mauritania a fin de llegar a las Islas Canarias.
Un portavoz del Ministerio de los Senegaleses en el Extranjero, que se ocupa de cuestiones migratorias, se negó a comentar sobre el más reciente caso.
La ley marítima internacional exige que cualquier persona que se encuentre en peligro en el mar debe ser rescatada y trasladada al lugar seguro más cercano.