Restaurar y proteger la naturaleza es una de las cosas más importantes para los ambientalistas y los amantes del ecosistema. Los bosques y la humedad permiten amortiguar los grandes fenómenos meteorológicos extremos logrando proteger viviendas, cultivos, suministros de agua e infraestructuras vitales.
Es por eso que hoy en Click Dominical, te mostramos 5 maneras en la que la naturaleza puede protegernos de los cambios climáticos.
Bosques y humedad:
Los bosques y la humedad naturales permiten absorber el agua durante las lluvias torrenciales y la almacenan para los periodos de sequía.
Árboles cipreses
Conocidos como los árboles cipreses mediterráneos, estos retienen grandes cantidades de agua en sus hojas y son capaces de resistir el fuego de los incendios forestales.
Árboles urbanos
Estos se encuentran mayormente en las ciudades y permiten enfriar el aire circundante, liberando agua a través de sus hojas y proporcionan gran alivio durante las olas de calor.
Arrecifes de coral y manglares
Ubicados en el mar, estos actúan como diques de contención para combatir las dos principales amenazas de la subida del nivel del mar: inundaciones costeras y desintegración de las costas.
La vegetación
Absorbe el agua y logra reforzar el suelo y de esta manera ayuda a prevenir los deslizamientos de la tierra.