La Corte Penal Internacional (CPI) desestimó el pedido del gobierno de Venezuela de paralizar la investigación que lleva a cabo el fiscal Karim Khan por las graves violaciones a los derechos humanos cometidas en el país.
La Sala de Apelaciones consideró que Venezuela no presentó argumentos suficientes para justificar la suspensión de la investigación, que fue autorizada en abril por la Sala de Cuestiones Preliminares.
El régimen de Nicolás Maduro había apelado esa decisión y solicitado que, mientras se resolvía el recurso, se detuviera la facultad de investigar del fiscal Khan. Entre los motivos que esgrimió, estaba el supuesto riesgo de que la investigación afectara la soberanía nacional y la retraumatización de las víctimas.
Sin embargo, esta rechazó esos argumentos y afirmó que Venezuela no explicó cómo la investigación podría tener consecuencias irreversibles en caso de que se determinara que la CPI carece de jurisdicción sobre el caso. Tampoco demostró que las actividades del fiscal causaran un daño irreparable a los testigos y las víctimas.
De esta manera, el fiscal Khan podrá continuar con su labor de recabar evidencias y testimonios sobre los crímenes de lesa humanidad que se habrían cometido en Venezuela desde 2014, entre los que se incluyen asesinatos, torturas, detenciones arbitrarias y persecución política.