En Venezuela, por parte del Ministerio de Ecosocialismo y Agua, y también por parte de los gobiernos locales (gobernaciones y alcaldías), no existe una política ambiental.
Con preocupación lo expresa el doctor Héctor Herrera, profesor de educación ambiental, quien fue gerente de planificación del Instituto del Ambiente del estado Lara y es docente de la Universidad Territorial Andres Eloy Blanco y de la Universidad Pedagógica Libertador.
Al ser entrevistado por El Impulso manifestó que no existe una política que se dirija no sólo a la protección de los recursos naturales, sino al buen uso de los mismos, y a la construcción de una sociedad sustentable, como lo establece la Constitución del país y lo señalan los 17 Objetivos del Desarrollo firmados por Venezuela y otros 192 países en la ONU, en el marco de la Agenda 2030.
Crisis ambiental
¿Cuál es la mayor observación que hace usted?
El gobierno no ha construido esa política ambiental necesaria para producir mejores condiciones de vida para la sociedad y un orden económico en el tiempo. Lamentablemente, avanzamos de manera lenta, pero sostenida, hacia un nivel de crisis ambiental en todos los aspectos: mayor deterioro de los suelos, mayor contaminación atmosférica, manejo inadecuado de los desechos sólidos.
No hay una política que signifique producir insumos agrícolas sustentables y, por otra parte, se hace uso del territorio sin respetar las condiciones ecológicas de los diferentes espacios.
Se explotan las zonas mineras sin importar los efectos dañinos ocasionados en las cuencas hidrográficas. Y hay una grave destrucción de la biodiversidad.
Todo esto está relacionado con el calentamiento global, que tendrá un efecto muy negativo en el mundo, incluyendo a Venezuela por supuesto, porque va a alterar el régimen pluviométrico, el cual afectará sobre todo la producción de alimentos.
Pareciera que el Ministerio de Ecosocialismo y Agua, que sustituyó al Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales, no tiene en su desempeño la construcción de una verdadera política ambiental.
Es conveniente que la sociedad civil, las diferentes universidades e instancias públicas se interesen por el deterioro ambiental, el cual va a afectar la vida humana y, en general, la vida en todas las manifestaciones.
Funcionarios incapaces
¿Es que en el gobierno no hay capacidad de entender los riesgos que tiene la despreocupación por el ambiente?
Creo que al frente de los organismos relacionados con el ambiente no han sido colocados los profesionales preparados para tal fin. No ha sido escogido personal calificado, bien formado.
Bañarse en el Guaire
¿No cree usted que también los gobernantes hablan sin pensar lo que están diciendo, como cuando Hugo Chávez le dijo a Daniel Ortega que al año siguiente lo iba a invitar para que se bañara en el Guaire y hasta le ofreció un sancocho para celebrar la limpieza de ese río, que hoy está peor que en aquella ocasión por cuanto se encuentra mucho más contaminado?
Claro. Y recuerdo que también Jacqueline Faría lo dijo en una ocasión.
(La ingeniero Faría tuvo importantes funciones gubernamentales tanto con Chávez como con Nicolas Maduro y fue jefe del gobierno de Caracas. En su gestión ministerial comenzó el proyecto de saneamiento de los 72 kilómetros del Guaire con una disponibilidad de 600 millones de dólares y ella anunció que en el 2.014, cuando terminaran los trabajos, se lanzaría al río para bañarse. Sin embargo, el saneamiento nunca se hizo).
Gobierno depredador
Este gobierno, continuó diciendo nuestro entrevistado, que en algunos momentos ha hecho los anuncios más rimbombantes acerca del ambiente, se ha caracterizado por ser, lamentablemente, uno de los más grandes depredadores del ambiente que ha existido en la historia republicana y en el mundo.
¿Qué ha hecho?
El ejemplo más impresionante es la destrucción del denominado arco minero. Este tiene una superficie superior a los 111 mil kilómetros cuadrados, que es mayor a la de cualquiera de estos países: Liberia, Bulgaria, Cuba, Honduras, Islandia, Corea del Sur, Portugal, Austria, entre otros. La extracción de oro y otros minerales se hace sin control y ocasionando daños ambientales muy graves en esa región.
La Gran Misión Vivienda ha producido grandes problemas porque se construyeron viviendas sin ningún criterio ambiental e incluso han tenido dificultades porque no se tomó en cuenta el suministro de agua para muchos de los sitios urbanizados.
Otro de los problemas es la contaminación del lago de Maracaibo por accidentes en las instalaciones petroleras y el derrame de petróleo que se ha venido produciendo desde las refinerías, como la de El Palito. La antigua Pdvsa, la que existía antes de que llegara este gobierno y la destruyera, tenía estructuras internas para disminuir el impacto ambiental y producir cambios importantes en las diferentes comunidades. Eso se perdió porque hubo descuido.
Lo que está ocurriendo con el Sistema Alto Tocuyo se debe a que no hay protección de la cuenca alta del río Tocuyo, donde hay una gran deforestación y destrucción de la vida vegetal, lo que tiene que ver con la erosión de los suelos por donde la escorrentía se lleva los sedimentos en el caudal que terminan depositándose en el embalse de Dos Cerritos.
Recuperar la cuenca
¿No existe solución para ese problema?
Nosotros creemos que si el gobernador del estado, Adolfo Pereira, tiene preocupación por la sedimentación del embalse Dos Cerritos puede ser algo muy importante, como desarrollar un programa bien concebido para recuperar la zona afectada y, a tal efecto, llevar a cabo labores de reforestación de la cuenca alta del río Tocuyo.
Además, tenemos que darnos cuenta que avanzamos hacia una degradación muy peligrosa y que, por tanto, hay que detenerla. Se puede llevar a cabo un t plan de ayuda climática urbana, mediante la creación de juntas comunitarias en el medio urbano, que se ocupen de hacer plantaciones para tener, en un futuro, árboles.
A la alcaldía de Iribarren hay que sugerirle atender debidamente el vertedero y efectuar un proyecto de aseo urbano a tono con los tiempos, que permita reciclar la basura, que contemple entrega de desechos clasificados, para marchar hacia una transición energética y darle el mejor uso al agua.
Existe una gran escasez de agua en diversos sectores de Barquisimeto y en otros, el agua es desperdiciada porque hay brotes del líquido que inundan calles y sectores.
Hay comunidades a las cuales les llega el agua cada quince días, pero vemos como funcionan algunos autolavados donde gastan el preciado líquido sin miramiento alguno, pero la alcaldía no ha obligado a que tengan un sistema de reciclado o un mecanismo que haga el uso racional.
No se entiende cómo El Manteco es uno de los sitios más asquerosos de la ciudad, ya que es un sector comercial, pero algunas de sus calles están llenas de aguas negras y malolientes. De igual forma se puede ver y sentir este problema por la carrera 24 con la calle 8, así como también por el oeste.
Y en general, en la ciudad existe una gran contaminación porque circulan aguas con contenido fecal. Pero, no hay por parte del gobierno ninguna acción para ponerle coto a esa situación de insalubridad.
Entendemos las dificultades que tiene el sector público por falta de recursos, pero es que podría ponerse a pensar la forma en que la gente, especialmente el sector privado, podría plantear soluciones.
No tenemos los habitantes de Barquanta de tratamiento de aguas servidas y ese tipo de instalación es fundamental para disminuir el impacto ambiental.
Profesionales preparados
Decía usted que en cargos para atender el ambiente no se han colocado a los más idóneos. ¿Será posible que se piense distinto?
Aquí hay gente muy estudiosa y formada en política ambiental, incluso formada en Venezuela y en universidades de países desarrollados.
Hay que formar a las nuevas generaciones. Esta es una lucha importante porque es trascendente. Tenemos buenos ingenieros y otros profesionales que están trabajando y opinando, pero no se les oye.
Consideramos que las personas que van a gobernar van a provocar cambios y llamarán a los mejores venezolanos que tengan la formación y la disposición de dar lo mejor para hacer una Venezuela distinta con un modelo de desarrollo actualizado, que proteja los recursos y que produzca prosperidad para todos sin destrucción del ambiente.
¿Cuándo se habla de ambiente que se aspira?
Desde este espacio quiero hacer un llamado a todos los partidos políticos que aspiran ser gobierno, para que entre las ofertas electorales sea plasmado un programa en que digan cómo se va a abordar todo el tema ambiental. Porque en esta materia el gobierno ha tenido un pésimo desempeño. Los políticos que quieren gobernar a Venezuela deben pensar en la construcción de una visión de país sustentada en el paradigma ecológico porque de lo contrario no va a haber futuro.
En el mundo tenemos una destrucción de los océanos, de las selvas, de los suelos fértiles y pérdida de la biodiversidad.
No hay que olvidar que la huella ecológica, lo que se necesita cada año en el planeta para consumir bienes y servicios, se agota. Lo que consumimos el año pasado lo vamos a consumir en el mes de julio.Si seguimos en esa vía, tal como decía Sthephen Hawking hace algunos años, vamos a necesitar tres planetas Tierra para poder vivir los próximos años. Los gobiernos tienen que pensar en la política ambiental y comenzar por la educación ambiental, que es un conocimiento escaso en Venezuela. Hay que pensar la forma en que las empresas tienen que producir, la forma en que se debe cultivar, la forma en que se debe comerializar y trabajar.
Nuestra Constitución tiene principios sobre el desarrollo sustentable, pero eso no se está cumpliendo. Y de allí que de una vez tenemos que pensar y actuar porque la degradación ambiental está avanzando peligrosamente contra nosotros.