Un perverso juego de engaños al pueblo venezolano han sido las 19 mesas de diálogo entre el régimen castro, chavista, madurista y la cohabitación oposición blandengue, porque no han servido para nada.
La declaración fue dada por Juan Barragán, dirigente regional de Alianza Bravo Pueblo, quien añadió que ninguno de los problemas de servicios (agua, energía eléctrica, gas, gasolina, gasoil, transporte, salud, educación, comunicaciones y otros) en lugar de experimental mejoría, se han agravado.
Y lo peor de todo es que la situación económica de la población ha llegado a la extrema pobreza y se encuentran, en este momento, casi ocho millones de venezolanos esparcidos por todo el mundo porque aquí no podían vivir.
Este régimen además no sólo permitió que la delincuencia se armara con poderosas pistolas, fusiles, ametralladoras y granadas, sino que les dio territorio denominados zonas de paz para que tuvieran su propio dominio y pudieran operar a sus anchas. Su apoyo fue tan amplio a los delincuentes, que estos formaron megabandas que hacen de las suyas en toda Venezuela y ya tienen ramificaciones en diversos países del continente.
Estas declaraciones las hago ahora, cuando tenemos ya cerca en el calendario el primero de mayo, Día del Trabajador, para decirle al régimen que nada tenemos que celebrar, porque el salario mínimo de los trabajadores, el pago obligatorio de los jubilados y la pensión de las personas de la tercera edad es una bofetada, ya que apenas supera los cinco dólares.
Como no hay nada que celebrar, si hay motivos, y muchísimos, para protestar enérgicamente en las calles, expresó Barragán. Hay que demostrarle a este régimen que ha destrozado el país y empobrecido a los venezolanos que rechazamos su socialismo del siglo 21 porque es una basura y, como tal, debe ir al muladar de la historia.