Financiar el despegue de la agricultura venezolana requiere de un mil quinientos millones de dólares. Esa es la cifra que suministró a El Impulso, Celso Fantinel, presidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro).
No sólo ese es el problema para producir, sino otro, que atenta no sólo contra la producción sino con la propia seguridad de los agricultores: la extorsión.
Si los delincuentes no consiguen las cantidades de dinero que exigen a sus víctimas, entonces, proceden con la violencia en todas las formas.
Sin embargo, a pesar de las dificultades, dijo que los productores están trabajando y, además, de estar invirtiendo, se preparan cada día para mejorar sus actividades.
En este sentido se refirió a cursos, talleres, asambleas y otros eventos para la capacitación de los miembros, a fin de incorporarlos al mundo de la globalización y hacerlos más competitivos.
Agricultores
¿Cuántos agricultores existen en Venezuela?
Como tales, hay más de 120 mil, registrados hace unos doce años. Sabemos que somos más, ya que no todos fueron registrados, pero realmente están haciendo un esfuerzo extraordinario. Algunos han tenido que abandonar por la crisis económica, pero muchísimos siguen produciendo alimentos para todos los venezolanos.
¿Qué está haciendo Fedeagro por ellos?
Fedeagro es una federación de asociaciones de productores. Nosotros creemos en la asociatividad. Somos unas cooperativas modernas, en las cuales está la fuerza de Fedeagro. Hay asociaciones con 400 y hasta 1.200 miembros. Existen asociaciones de café, maíz, arroz y otros rubros. Esa unión hace una fuerza de producción importante para cada región donde ellos desempeñan su trabajo.
Extorsión
¿Cuál es el principal problema que tienen los productores actualmente?
La extorsión. Los delincuentes exigen dinero a los productores, pero cuando éstos se niegan a esa demanda, los antisociales les destruyen los equipos y maquinarias, procediendo, además, a la destrucción de las fincas. No se debe aceptar el pago de extorsiones, porque tal práctica delictiva está prohibida y, por tanto, hay que denunciarla. Sí vemos que hay una acción policial y militar, pero es insuficiente y por ello planteamos la necesidad de que sean incorporados más funcionarios y ser mejor equipados. Consideramos que a mayor denuncia habrá mayor efectividad.
Contratos
¿Cómo se está desarrollando el acuerdo con el sector industrial?
Fedeagro se va a reunir con la industria, como hicimos en el 2002 y con la Asociación Venezolana de Industriales de la Harina de Maíz (Venmaíz), cuando llegamos a un precio justo. Pero, ya hay productores que están logrando una agricultura de contratos sobre todo con el maíz amarillo, el girasol y el frijol. Es importante hablar del maíz porque es un cultivo que crea economía en los estados donde se siembra.
¿A qué nivel se ha llegado?
Hasta ahora se han logrado acuerdos mínimos, pero las asociaciones pueden llegar también a los acuerdos de palabra.
Precio
¿No existe peligro de pérdidas?
Ya los agricultores no pueden sembrar a ciegas. Existe una agricultura de contrato, muy timorata, de la cual no se habla. Al tener un precio equilibrado el agricultor debe establecer una productividad, pues sabe cuánto va a gastar, en cuánto va a vender y cuánto tiene que producir, porque comprende que eso es importante para que haya ganancias de parte y parte.
Financiamiento
¿Cómo están haciendo los productores para obtener financiamiento?
El financiamiento es limitado porque el país tiene problemas de ingresos. De 250 mil millones de dólares que recibía Venezuela hace siete u ocho años, ahora dispone apenas de 60 mil millones. En cuanto a la agricultura hay muy poca erogación de créditos. La agricultura necesita 1.500 millones de dólares al año para despegar y apenas se invierte en la cartera agropecuaria 124 millones de dólares al año. Estamos muy lejos de los 700 millones de dólares del 2013. De manera que es necesario recuperar capacidades o buscar inversionistas, que pueden venir a través de las bolsas.
¿Es posible la agricultura a través de bolsas de valores?
El sector primario puede estar en la Bolsa de Valores de Caracas, la Bolivariana y nuestra bolsa natural agrícola, cosa que no pasa con otros sectores. Nosotros podemos emitir bonos de prenda, contratos en la bolsa de valores, pignorar nuestras cosechas. Lo que hay es que instrumentalizarlas. Que la Superintendencia Nacional de Valores (Sunaval) y la Superintendencia Nacional de Gestión Agroalimentaria (Sunagro) nos proporcionen el certificado de estos instrumentos para dar una seguridad al inversionista.
Creo que estamos a un mes de que salgan nuevamente instrumentos con los cuales podamos transar materias primas en forma transparente.
¿En cuáles rubros?
Maíz, caña de azúcar, arroz, frijol de exportación, café, cacao y asimismo maquinarias y equipos.
Contrabando
¿Cómo ha visto el ingreso ilegal de cebollas, ajo, papas y otros productos por la frontera?
Nosotros tenemos esa frontera viva y como hay empresarios y no empresarios que no quieren pagar impuestos, ni acatar ninguna normativa, ingresan productos por las trochas. No sólo introducen alimentos, sino también agroquímicos que han dañado cultivos porque no rinden los efectos, sino todo lo contrario. Nosotros hemos venido haciéndoles llamados a los consumidores para que no adquieran harina y otros alimentos de mala calidad que entran de contrabando. Del mismo modo le pedimos a los agricultores que no compren herbicidas e insecticidas, los cuales han ocasionado daños a las plantaciones y hasta han quebrado económicamente a muchas personas. La gravedad del asunto es que hay unas doscientas trochas en la frontera colombo-venezolana, sobre las cuales no existe control.
Tecnología
Si ha habido destrucción de suelos, ¿no se ha pensado en utilizar la inteligencia artificial para tratar ese problema?
Todo eso vendrá según el poder de compra y del ingreso que tenga el agricultor. Ya hay agricultores de cierto tamaño que lo hacen y utilizan la agricultura digital, software, hardware, satélites. Eso va a venir, pero, por supuesto, no para todos y es lamentable. En los Estados Unidos y en Europa son los gobiernos los que disponen de enormes recursos para que los agricultores no se queden rezagados, tomando en consideración que la tecnología es muy costosa.
¿Están utilizando drones en la agricultura?
Ya están incorporados drones para siembra, fumigaciones, tomar fotos y hacer análisis a los cultivos. Insisto en que no todos los productores tienen el flujo de caja y el dinero para poder hacerlo. Y para eso debiera haber un gobierno que destine apoyo, dinero, para ese tipo de tecnología.
¿Es posible saber en qué porcentaje se ha destruido el suelo venezolano?
-Después de sesenta años de uso podemos decir que, en un alto porcentaje, hemos perdido materia orgánica y tenido en la zona del eje andino infecciones con bacteriosis y eso hay que combatirlo.
Exportación
Si ha habido cierto progreso en la agricultura, ¿cuáles son los rubros que Venezuela puede exportar en los momentos?
Se está produciendo frijol es el cien por ciento y tenemos también ajonjolí en el 95 por ciento. Estamos exportando aguacate, cacao y algunas toneladas de café, las cuales están exigiendo empresarios que saben de la calidad del grano. No sólo los agricultores, sino también los ganaderos tienen que prepararse para este mundo porque estamos viviendo la apertura global. Hay gobiernos que protegen los cultivos, pero en el mundo global hay que ser competitivos y eso es lo que estamos haciendo en Fedeagro mediante foros, talleres, cursos, asambleas y todos los eventos que programamos para prepararnos y ser, como he dicho, más competitivos.
Hectáreas
¿Cuántas hectáreas serán sembradas este año de maíz, que usted dice que es el rubro más importante?
Hay insumos para más de 350 mil hectáreas. El año pasado se sembraron 260 mil. Creemos que si mantenemos ese número será un logro importante.
¿Qué se espera?
Seguir creciendo, no retroceder como ocurrió hace cuatro años cuando hubo un retroceso del 80 por ciento. La caña de azúcar, por tercer año consecutivo, recuperó cada año 20 por ciento; maíz, por segundo año consecutivo, recuperó 20 por ciento; las hortalizas se vienen recuperando y se ven en todos los mercados. Y así por el estilo, porque ese es el compromiso que tenemos nosotros.
Usted habla de caña de azúcar, pero se dice que ya los centrales no funcionan como antes.
Lo que sucede es que hay un bajo poder de compra y, naturalmente, bajo consumo. Vinieron unas importaciones extemporáneas en diciembre y crearon un inventario que todavía no se ha podido vender. Hay un inventario de la nueva zafra y, entonces, los centrales no han podido cancelar a los productores.