El excandidato a gobernador del estado Lara, Luis Florido, considera que es pésimo el servicio de aguas blancas y aguas servidas por parte de Hidrolara se debe a la falta de recursos, principalmente, y a la carencia de una buena gerencia.
Es por ello que, tal como lo hizo en su campaña, insiste en plantear soluciones reales y oportunas, porque no se pueden hacer promesas si no existe la voluntad de cumplirlas.
El gobernador Adolfo Pereira, hace ya más de un año, prometió resolver el problema de los servicios, pero no ha cumplido y no tiene idea de qué se puede hacer.
Mientras tanto, la población está sufriendo por la escasez del preciado líquido, por una parte; y por la otra, no existe ningún proyecto, ni programa, para las aguas servidas y los olores nauseabundos se propagan por todas partes.
Nuestro planteamiento, dijo a El Impulso, es muy claro: proporcionarle autonomía financiera a Hidrolara, para que pueda mantenerse y prestar un servicio de calidad, ya que de lo contrario el deterioro del servicio será aún mucho mayor y, por supuesto, más grave el problema.
No es posible que un servicio pueda mantenerse si no se cuenta con el apoyo de los usuarios, dijo. El populismo exacerbado de quienes tienen el gobierno en Lara es perjudicial para el pueblo, puesto que no se toman las decisiones adecuadas. Aquí se aplica el viejo refrán: No lavan, ni prestan la batea.
Si vivieran en el norte o en el oeste de Iribarren, comentó, seguramente ya se habrían percatado del mal servicio que presta Hidrolara; pero, no sólo residen en zonas de gran comodidad, sino que tienen a su disposición el agua que necesitan las 24 horas de cada día. Y los habitantes de los sectores más abandonados, qué sufren, porque no entienden que gobernar es servir al pueblo.