Según el regente Heredia, citado por Silva Uzcátegui, protagonizó varios enfrentamientos “en los desfiladeros de Siquisique y luego en el Valle de Baragua…” teniendo lugar estos combates a finales de noviembre de 1811.
El 23 de marzo de 1812 comandaba las fuerzas patriotas de Carora pero enfermó y poco pudo hacer “para el desempeño de sus funciones”, dice Iribarren Celis, y las fuerzas de Reyes Vargas poca dificultad tuvieron para apoderarse de la plaza.
Ignoro si fue entonces cuando murió pero su viuda Josefa Bolívar y su cuñada Luisa, reclamaron que los bienes embargados a Gil por el gobierno español, les fuera devueltos porque les pertenecían a ellas como herencia paterna.
9. Domingo Perera, caroreño, el 19 de abril de 1811 ofreció un banquete a los simpatizantes y oficiales patriotas, donde residía en Barquisimeto, para celebrar el primer aniversario de los sucesos con que se inició en Caracas la lucha por la independencia suramericana. En la fachada de su casa hizo colocar un cuadro símbolo de la libertad que iluminado por las noches, permaneció durante 3 días a la vista del público. En la plaza principal colocó un alambique de aguardiente para festejar el glorioso acontecimiento. Perera, luego del 19 de abril de 1810 había sido nombrado por la Junta Suprema Alcalde Ordinario de Primera Elección en Barquisimeto y mantenía correspondencia con Juan Germán Roscio, con el marqués del Toro y con su paisano José Ángel Alamo.
Por el expediente del juicio de infidencia que se le abrió el 4 de junio de 1812, se sabe que Perera invitaba a los pulperos de la ciudad a festejar y unirse a las filas patriotas. Igualmente solicitó donativos a la población para recibir a un embajador de Cundinamarca que visitó Barquisimeto y venía de Bogotá.
Perera, durante el juicio que se le siguió, fue acusado de sustituir el retrato del rey Fernando VII por el de una india que Miranda había señalado como símbolo de la libertad venezolana y en noviembre de 1812, encontrándosele culpable de las acusaciones, se le embargaron sus bienes.
Sobre la suerte posterior de Perera la noticia más cierta parece ser la de Eliseo Soteldo quien en sus Crónicas de Barquisimeto, dice que fue enviado a Coro donde las autoridades españolas no encontrando méritos para detenerlo, lo dejaron en libertad por lo que Monteverde en carta del 10 de junio de 1812, se quejaba de que Perera se encuentra “en su patria Barquisimeto”,
Sus actividades al servicio de la independencia recibiendo la muerte de manos de quienes, en nombre del rey de España, gobernaban en Barquisimeto, tal como lo escribió su hermana María de la Concepción Perera.
10. José Joaquín de Altolaguirre fue un guipuzcoano, casado y en ejercicio del cargo de Justicia Mayor interino en la vecina región de Aroa. De profesión minero y activo simpatizante de la independencia, y fue así como en diciembre de 1811, invitó a los comandantes patriotas de San Felipe y Barquisimeto a invadir la región de Aroa y destruir los comandos realistas en Aroa.
En una operación contra los españoles que dirigió en el cerro de El Tigre, salió derrotado y al ser capturado se le decomisó un comprobante de haber donado 25 quintales de cobre a las tropas del marqués del Toro, una copia de la Constitución sancionada el 5 de julio de 1811 y un diario de instrucciones pero además, en su vivienda, le encontraron cuatro pares de pistolas, un fusil y 18 lanzas, fabricadas por sus esclavos para rechazar los ataques corianos.
Fue encarcelado dos años y embargados sus bienes, pero el 13 de nero de 1813, Julián Izaguirre, comandante general de Coro, ordenó su libertad y que sus bienes se le devolvieran.
Altolaguirre si bien no actuó directamente en Barquisimeto, su contribución, al menos la señalada en el recibo que se le capturó, de 25 quintales de cobre para las fuerzas de Rodríguez del Toro y su invitación a los patriotas de Barquisimeto para atacar misiones españolas en Aroa, lo postulan como parte de esta historia marginada de Barquisimeto.
11. Juan José Bustillos, era el sacerdote de Aroa para el momento de la acción de El Tigre y como consecuencia de tal enfrentamiento Bustillos fue arrestado acusándosele de haber participado con Altolaguirre en este intento de destruir fuerzas realistas en Aroa, de haber enviado tropas contra las del rey y de portar documentos de la insurgencia que le fueron requisados en su detención: una copia de la constitución de 1811, así como un diario de instrucciones.
El 13 de mayo de 1813, solicitó y logró libertad por encontrarse enfermo y por lo avanzado de su edad. Absuelto de los cargos que se le hacían, quedó libre por órdenes del comandante general interino de Coro, Julián Izaguirre.
12. José Carrasco, nativo de Carora, formó parte de las tropas del marqués del Toro, alcanzando en las mismas, a los 24 años el grado de capitán que ostentaba en 1812, participando contra las fuerzas de Monteverde, cuando éste asaltó a Carora.
Tomada Carora por los realistas Carrasco debió buscar refugio en las tierras vecinas del Estado Trujillo donde en 1813 aparece combatiendo al lado de Atanacio Girardot en Carache y en la capital de aquella provincia, durante la Campaña Admirable.
En Carache el capitán Carrasco resultó herido y por tal razón se trasladó a Barquisimeto donde fue capturado por los españoles logrando fugarse de ellos, poco después.
En su ausencia, Manuel Geraldino, comandante político y militar de Carora, ordenó el embargo de sus bienes consistentes en una casa techada de tejas y totalmente amoblada, 4 esclavos y cinco cueros para guardar guarapo, valorado todo en 810 pesos.
Nada más agrega a estas noticias la licenciada Diana Pérez, quien las obtuvo del documento relacionado con este personaje que reposa en el Archivo General de la Nación, Sección Causas de Infidencia, tomo XXX, expediente 5, folios 127-155.
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