La jornada mariana culminó con mucha alegría y esperanza entre todos los venezolanos. La Procesión 165 de la Divina Pastora a la ciudad de Barquisimeto fue un reencuentro de cuerpo y espíritu entre los feligreses, quienes apreciaron volver a caminar junto a María por las calles de la ciudad.
Para la Iglesia Católica, esta procesión llevaba el lema del Reencuentro con María, y fue justamente lo que se evidenció: ríos de personas unidos en la misma fe y con la misma sensación de felicidad que se percibía en los rostros de cada uno de los feligreses.
Las diferentes autoridades de la Iglesia enviaron mensajes de ánimo y motivación para todos los venezolanos, a quienes los invitaron a seguir caminando junto a María, a confiar en la Virgen y a brindarle un lugar importante en sus vidas, pues ella es quien siempre está allí para interceder ante el padre.