En un mundo donde imperan la ley de la máxima ganancia y los antivalores del lucro y el individualismo, constituye una rareza la escritura de poesía. Máxime ahora con los innovativos inventos de internet, revolución digital y la inteligencia artificial en pleno desarrollo que afectan la cotidianidad del hombre.
Sus detractores argumentan su exiguo aporte al aparato productivo. Ello aun la exageración y riesgo de considerarlo un anacronismo.
No obstante, contra viento y marea sus cultores no cesan de crear en la firme creencia de que la poesía es el arte de la superior comunicación del hombre con su entorno.
Dedicado a la profesión científica de la ingeniería, Pedro Losada Sira es un ejemplo del fogoso amor a la poesía, una vertiente del arte literario. Un hecho del cual se siente orgulloso y proclama a los cuatro vientos cuando se presenta como poeta y luego ingeniero. De esa manera, en su persona se conjuntan arte y ciencia. Algo realmente admirable por los riesgos de ser visto como una extrañeza cuando de la poesía se trata. La poesía es una actividad inseparable de su inquieta existencia. Es un componente de su forma de ser y vivir, es decir, su particular cultura cotidiana a los 65 años de edad.
Así Losada Sira ha escrito y publicado en la segunda mitad del año 2022 su reciente libro titulado “Juglarías”. El mismo nos evoca los tiempos de la Edad Media cuando estos cultores se dedicaban a la recitación en las plazas, mercados y palacios. Eran los artistas de extracción popular que vendían su arte por unas cuantas monedas o el aplauso del público.
En el antiguo mercado El Manteco lo hacía, antes de su mudanza a MERCABAR, Canelito. Éste era un popular trovador que con su guitarra y canciones, al estilo de Panchito Riset, divertía a los presentes, durante el tiempo de ocio, en aquel conglomerado de relaciones económicas, culturales y humanas.
En estos poemas, escritos en prosa, Pedro Losada Sira se desborda en la expresión de múltiples sentimientos y emociones al igual que una variedad de temas, entre estos la familia. Contrario al marxismo, el autor suscribe la tesis de que la familia es la célula fundamental de la sociedad resaltando como fuente de valores.
Unos versos que nos recuerdan al contradictorio hombre en lucha por la ansiada felicidad. La evidencia de su condición de hombre de bien sensible al arte.
Esta es una poesía breve que se lee con rapidez por su estilo radiofónico de frases cortas para lograr una acertada comunicación. Estos textos reconfortan el espíritu por lo humano. Todo ello al tiempo que nos invitan a ser mejores en la vida al margen de la nefasta cosificación que envilece al hombre.
Freddy Torrealba Z.
Twitter: @freddytorreal11