Un deslave registrado este viernes 16 de diciembre en un camping turístico en Malasia dejó 16 muertos y las autoridades temían que otras 17 personas hayan quedado sepultadas en el lugar, situado en una granja ecológica a las afueras de la capital, Kuala Lumpur.
Según las estimaciones, en el momento del siniestro en el campamento de Batang Kali, en el estado de Selangor y a unos 50 kilómetros (31 millas) al norte de Kuala Lumpur, habría 94 malasios, explicó el jefe de la policía del distrito, Suffian Abdullah.
El número de fallecidos aumentó a 16 personas, entre las que había un niño de cinco años, añadió señalando que siete personas fueron hospitalizadas y los rescatistas buscaban a otras 17 que se cree que están desaparecidas. Además, 53 fueron rescatados ilesos.
Según Suffian, las víctimas habían llegado el miércoles a la zona, un lugar de recreo popular entre la población local para montar o alquilar tiendas de campaña en la granja. Más de 400 efectivos, incluyendo perros de rastreo, participaban en el operativo de búsqueda y rescate.
Los bomberos de Selangor empezaron a llegar al lugar de los hechos media hora después de recibir una llamada de socorro a las 02:24 horas, indicó el Departamento de Bomberos. El desprendimiento se produjo desde el lateral de una carretera a una altura estimada de 30 metros (98 pies) y cubrió una superficie aproximada de 1,2 hectáreas (3 acres). Se distribuyeron fotos de rescatistas con linternas excavando entre la tierra y los escombros de madrugada.
Algunas familias con niños pequeños se refugiaron en una comisaría cercana tras ser rescatadas. Los sobrevivientes contaron que escucharon un fuerte estruendo antes de que la tierra comenzase a caer.
Leong Jim Meng, de 57 años, fue citado por el periódico en inglés New Straits Times diciendo que un ruido fuerte “que sonó como una explosión” los despertó a él y a su familia y sintió que la tierra se movía.
“Myi familia y yo estábamos atrapados porque la tierra cubrió nuestra tienda. Logramos escapar a una zona de estacionamientos y escuchamos cómo se producía un segundo deslave», contó apuntando que era sorprendente porque en los últimos días no hubo precipitaciones fuertes, solo lloviznas ligeras.
El campamento está situado en una granja ecológica no lejos del complejo turístico de Genting Highlands, un popular destino turístico con parques temáticos y el único casino de Malasia. Las carreteras de acceso a la zona fueron cortadas.
