Los grupos y los equipos de trabajo no significan lo mismo. Existen diferencias bien marcadas entre los dos conceptos; primeramente es importante destacar que un grupo está conformado por dos o más individuos que interactúan y son interdependientes, quienes unidos entre sí buscan alcanzar objetivos específicos; ahora bien, un grupo de trabajo es aquel que se relaciona principalmente para compartir la información y tomar decisiones para ayudar a cada miembro a desenvolverse dentro de su responsabilidad.
Los grupos de trabajo son aquellos que se relacionan principalmente para compartir la información y tomar decisiones para ayudar a cada miembro del grupo. No existe la sinergia positiva necesaria que pudiese crear un nivel de desempeño mayor a la de las suma de sus contribuciones; en cuanto a su responsabilidad ante el grupo solo buscan resaltar las individualidades; mientas que un equipo de trabajo genera sinergia positiva a través del esfuerzo coordinado. Así, los esfuerzos individuales resultan en un nivel de desempeño que es mayor al de la suma de las contribuciones.
Estas definiciones ayudan a aclarar porque tantas organizaciones se han reestructurado a sus procesos de trabajo alrededor de los equipos de trabajo; de tal forma que esta permita generar la sinergia positiva que ayude a mejorar el desempeño organizacional. La aplicación de este concepto de equipos de trabajo crea el potencial para que cada organización genere mayores rendimientos sin incrementar el uso de los recursos; sin embargo no hay nada “mágico” en la creación de los equipos de trabajo que asegure la sinergia positiva. El simple hecho de llamarle equipo a un grupo no incrementa de forma automática su desempeño; los equipos de trabajo pueden realizar una variedad de actividades como por ejemplo: proveer servicios, coordinar proyectos, ofrecer asesorías y tomar decisiones. Entre los tipos comunes de equipos de trabajo están: equipos de solución equipos de trabajo autodirigidos, equipos multidisciplinarios
Equipos de solución de problemas: está conformado entre 5 a 12 personas del mismo departamento o unidad de trabajo que se reúnen algunas horas de cada semana para analizar la forma de calidad, eficiencia y ambiente de trabajo; los integrantes de estos equipos comparten ideas y ofrecen sugerencias, de tal forma permitan mejorar los métodos y procesos de trabajo. Sin embargo, rara vez se les asigna autoridad de manera unilateral a cualquiera de sus estrategias sugeridas.
Equipos de trabajo autodirigidos: están constituidos entre 10 a 15 personas que asumen la responsabilidad de su antiguo supervisor; esto incluye planear y programar el trabajo, asignar tareas a los integrantes, tomar decisiones operativas y trabajar de manera conjunta con los clientes y proveedores.
Equipos multidisciplinarios: está compuesto por empleados de más o menos el mismo nivel jerárquico pero de diferentes áreas que se reúnen para cumplir una tarea; para la conformación de equipos multidisciplinarios; para la conformación de estos equipos se requieren de estructuras horizontales.
La estructuración de equipos de trabajos y no de grupos de trabajo revisten tal importancia para las estructuras organizacionales que el célebre basquetbolista Michael Jordán expresó: “el talento gana juegos, pero el trabajo en equipo gana campeonatos”
Msc. Julio Cesar Vargas
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