El régimen de Nicolás Maduro acusó al fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, de tener “una visión claramente prejuiciada” en su investigación sobre presuntos crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
Tales declaraciones fueron emitidas en un comunicado por el canciller del régimen, Carlos Faría, días después que la CPI solicitara un permiso para reanudar su trabajo de investigación en el país.
“Lamentamos que el fiscal insista en una investigación basada en fuentes secundarias guiadas por intereses políticos”, dijo Faría, en referencia a organizaciones no gubernamentales, víctimas y familiares que han denunciado la comisión de delitos de lesa humanidad desde 2017.
Seguidamente, recriminó que “a pesar de toda la información suministrada y los fluidos intercambios sostenidos con la Fiscalía durante el año 2022, el fiscal Karim Khan mantenga una visión claramente prejuiciada en relación con la situación de Venezuela, haciéndose eco de las campañas que pretenden instrumentalizar el tema de la justicia y los derechos humanos con fines políticos”.
“Es especialmente preocupante que la solicitud del fiscal se fundamente básicamente en fuentes secundarias carentes de toda credibilidad, dada su marcada parcialidad y clara politización, en perjuicio de la rigurosidad que se espera de una instancia internacional de tanta relevancia en materia de administración de justicia especializada”, reprochó.
Días atrás, Khan solicitó a la Sala de Cuestiones Preliminares del organismo que autorice la reanudación de su investigación sobre crímenes de lesa humanidad en Venezuela, detenida desde abril de este año por solicitud de Maduro.
