A la memoria de mamá Pimpumchita+…mi gran amor y a papá Pipo+, Charlie, Nell, Danny, Caleb y Jacob… y a toda la familia
Carmen Teresa Carreño de Faillace (+)
<<No hay tiniebla más oscura que haberte perdido…
…ni luminaria más radiante que haberte obtenido, mamá>>
Mistifu
<<Uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde>>
Sir. Terry Pratchett
Cuando se crece y uno se da cuenta que la vida tiene fecha de vencimiento, el mayor pánico del cosmos no es irse del plano vital, sino que mueran tus seres queridos. Pero nada teme más el hijo que aún no tiene descendencia que la pérdida de su madre. Eso no cambia mucho cuando se tienen hijos, aunque algunos se desentienden de los padres cuando llegan a viejos. En esos momentos de orfandad, luto y nostalgia lo que menos provoca es hablar y si pudieras dejar de pensar, sería estupendo. Jamás se deja de pensar en un amor tan grande, solo el tiempo amaina el sufrimiento pero la pena es un traje cocido a la piel que llevamos al más allá. Y todo cambia en segundos. Nada será igual. Todos sabemos que un día llegará pero siempre nos agarra con la guardia baja, sin aviso y sin protesto.
No relataré la vida de mamá cuando enfermó pues publiqué en este mismo rotativo la primera parte (*) y espero poder escribir la segunda lo que en cualquier idioma es otra despedida. Vivir sin memorias es como vivir a merced de un extraño que no responde a tus órdenes. No concibo algo tan o más aterrador… La despedida es distinta para cada deudo, ni mejor ni peor, solo diferente y la mayor parte del tiempo pesada y a ratos todo el peso del mundo en un solo hombro. No obstante poco pesa cuando se trata de mamá o si pesa, la queja es introspectiva, sosegada, retribuida y épica.
Mamá nos dejó este domingo 02 de octubre. Tengo el sentimiento que ya nos había abandonado poco a poco, años antes. Lo viví día a día y nada me ha hecho más hombre y mejor que haber vivido a su lado la recta final de esta increíble madre. Si quieres enterarte cómo fueron los inicios del final y los finales sin inicios abajo encontraras su vía crucis a través de ojos hechos extremidades y manos hechas palabras y palabras hechas memoria y memorias hechas olvido. No me despediré de mamá ni muerto pues ese día la abrazaré tan fuerte como cuando me dejó al borde de la cama en un vago aliento. Solo te pediré un chico favor mami. Dile a papá que lo amo y que lo extraño y a los que estén cerca diles que los llevo en mi corazón donde existen con todo ese brío que otorga el entusiasmo del amor.
Madre amada gracias mil millones de gracias por darme la vida y con solo tu sonreír enseñarme que el amor de veras existe…hasta pronto mamita…te amo al infinito y más allá; siempre tú consentido querubín… Mistifu… aquí te dejo un poema para tu llegada al edén.
Habitaciones del Alma
Desde el cofín de las murallas
Hasta los campos del espejo…
Abrasaran los desiertos de telas
Apalearan el infinito, las tristezas
Y en la insignificancia, las horas
Entrarán invadiendo el alma…
Marcantonio Faillace Carreño
*#OPINIÓN Memorias del olvido: Olvidé que te olvidé #6Abr
*#OPINIÓN Memorias del olvido: La huella perenne #20Abr
*#OPINIÓN Memorias del olvido: La Ley del Desorden #4May
*#OPINIÓN Memorias del olvido: Sondeos de la Sgto. Saunders (Parte IV) #11May
*#OPINIÓN Memorias del olvido: Pentagrama para memorias #18May
*#OPINIÓN Memorias del olvido: La indiscreción de los descuidos #25May
*#OPINIÓN Memorias del olvido: La poética del silencio #1Jun
*#OPINIÓN Memorias del olvido: Cuando el olvido nos alcance (Parte VIII) #8Jun