Los habitantes de la comunidad Valle Verde en la parroquia Valentín Valiente en Cumaná, capital del estado Sucre, denunciaron que siguen a la espera de ser atendidos por las autoridades regionales, tras verse afectados el fin de semana por las intensas precipitaciones.
Aunque fueron atendidos por Protección Civil (PC) durante la tormenta que provocó el deslizamiento del cerro Pan de Azúcar y que provocó que grandes piedras estrellaran contra sus viviendas, aseguran que no han «llegado a nada» que les resuelva sus problemas. Un total de nueve familias quedaron damnificadas.
«Queremos que nos den respuesta a la reubicación, esto no es juego. Hay amenazas de lluvias y estamos durmiendo en las aceras. Queremos garantía de los hogares que nos van a dar», expresó Lucy Pereda, residente de la comunidad Valle Verde.
Hay otras familias en la zona que tienen más de 12 años en una situación similar y temen que les suceda lo mismo. «No queremos ser olvidados cómo nuestros vecinos», expresó una de las afectadas.
Rechazaron la intención del gobierno regional de hospedarlos indefinidamente en las instalaciones del Polideportivo Félix Lalito Velásquez en la capital sucrense y exhortaron al gobernador Gilberto Pinto a atender sus reclamos.
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