Alexander Cambero vive y escribe en Duaca. Pesaba más de cien kilos pero leyendo la biografía de Balzac quien era brillante escritor pero gordo, feo y rechazado por las damas, el decidió ser flaco y elegante para cortejar a las novias que motivan sus poemas de feibu.
Alexander lee varios libros al mismo tiempo y escribe sobre temas profundos igual que sobre aconteceres de farándula, con la misma pluma que algunas veces es cóndor imponente y otras colibrí de hermosos vuelos filigrana.
Impresiona cuando desarrolla cualquier tema de política internacional porque conoce al detalle los escenarios internos del país sobre el cual enfoque su aguda inteligencia. Una vez entrevistado por Iván Claudio y Jorge Euclides Ramírez sobre unas elecciones presidenciales en México realizó un análisis pormenorizado de los 32 estados que conforman este país citando líderes regionales, porcentajes de popularidad de partidos políticos y candidatos en cada región, tendencias ideológicas que configuran el espectro de orientaciones electorales, en fin, dibujó un mapa exacto de indicadores porcentuales y vaticinó el triunfo de Vicente Fox, con una cifra muy cercana a la que realmente obtuvo.
Actualmente escribe para varios periódicos de Latinoamérica y España siendo su firma altamente cotizada por las editoriales de habla hispana .En Colombia se ha convertido en una referencia de opinión insoslayable y sus escritos le han granjeado amplia popularidad e influencia, al punto que el recién electo Presidente Gustavo Petro tuvo a bien enviarle una carta elogiando su desempeño como periodista de análisis político.
En Venezuela es articulista de varios periódicos y constantemente su nombre es mencionado como sinónimo de pulcritud en el manejo del lenguaje y profundidad en el desarrollo conceptual de los asuntos que aborda.
Como novelista ha participado en varios concursos europeos obteniendo importantes menciones y abriendo puertas para futuras publicaciones. Sus relatos tienen una trama inspirada en Julio Garmendia con el misterio de la narrativa de lo real maravilloso de Asturias, en una conjunción de mundos aéreos que tocan realidad en los paisajes de Duaca.
Precisamente en el proceso de fortalecer sus músculos caminando durante horas en las montañas que rodean su ciudad natal Alexander fue perfeccionando su prosa para hacerla también enjuta como la de Agota Kristoff y llevar al lector una dinámica vivencial que baja de los árboles más altos hasta la altura de una mirada inocente.
Cristal Almao, sobrina de Yuli y ahijada de Pepe, un día lo vio subir gordo y cansado hacia Montaña de Oro. Por asuntos de estudio esta niña viajó a Barquisimeto por dos años y al regresar a su casa vio bajar a un flaco vigoroso y trotón, quien resultó ser Alexander con 50 kilos de menos. Cristal se le acerca y le pregunta que encontró arriba de los cerros que lo transformó en un adonis y él mirándola con afecto paternal le respondió, encontrè la sabiduría de Zaratustra para vencer al mundo mediante la palabra. Alexander vio que la niña no le había entendido y le completó diciéndole: En las montañas aprendí que lo mejor en la vida es tratar a Dios de cerca y a los políticos de lejos.
Jorge Euclides Ramírez
