Este miércoles, durante la Audiencia General con el Papa Francisco, un niño de cuatro años se acercó a saludar al pontífice en el Aula Pablo VI del Vaticano.
El pequeño se acercó después de que el Papa Francisco terminara su catequesis centrada en la importancia de la transmisión del testimonio entre ancianos y jóvenes, reseñó aciprensa.
Tras saludar de manera cariñosa al niño, el Papa Francisco se dirigió a la multitud y dijo: “En la audiencia hablábamos del diálogo entre ancianos y jóvenes. Esto ha sido valiente”, dijo el Papa con una sonrisa.
«¿Te gusta estar aquí?», le preguntó el Santo Padre al pequeño, a quien también preguntó su nombre y le invitó a sentarse junto a él. El niño pequeño se quedó junto al Papa Francisco hasta que finalizó la Audiencia General.
En su catequesis, el Papa aseguró que “dar testimonio de la fe delante de un niño es germinar esta vida. Es más, dar testimonio de humanidad y de fe es la vocación de los ancianos. Dar a los niños la realidad que han vivido como testimonio, dar el testigo. Los ancianos estamos llamados a esto, a dar el testigo para que ellos lo lleven adelante”, aseguró el Santo Padre.
A continuación, el Papa aseguró que “el testimonio de los ancianos es creíble para los niños: los jóvenes y los adultos no son capaces de hacerlo tan auténtico, tan tierno, tan conmovedor, como los ancianos”.
Además, el Papa Francisco explicó que “el testimonio de los ancianos une las edades de la vida y las propias dimensiones del tiempo: pasado, presente y futuro. No son solo la memoria, también el presente y también la promesa”.
Con información de: Aciprensa