Un recorrido por importantes supermercados de la ciudad en la tarde de ayer, confirmó que muchos de éstos cerraron después que se conociera la muerte del Presidente de la República y se decretaran siete días de duelo nacional. Los comercios del casco de la ciudad, decidieron trabajar media mañana por seguridad de sus bienes y de sus trabajadores.
Tal fue el caso del Mercado Terepaima, que laboró sólo hasta el mediodía de ayer por la poca afluencia de consumidores. Las ventas han mermado considerablemente la mañana de hoy, dijo Juan Oviedo, vendedor de frutas y hortalizas del citado mercado municipal.
Sin embargo, dejó de trabajar por protección a los consumidores. A pesar de tener escasez con algunos rubros de alimentos como harina de maíz, margarina, y artículos como el papel higiénico, nosotros no cerraremos nuestro establecimiento, dijo la gerente de compras de una importante comercializadora de alimentos de la carrera 21.
En las primeras horas de este miércoles, EL IMPULSO visitó puntos comerciales de la principal urbe en el centroccidente del país, constatando que en efecto, muchos de los comercios estaban cerrados y que los consumidores dejaron de ir incluso a los centros comerciales a hacer las compras habituales, principalmente la compra de alimentos. Los transportistas y trabajadores no fueron a laborar en apoyo a luto nacional, sin embargo, los propietarios no ven del todo positivo que el país se paralice por tantos días.
Ahora lo más importante para el país es trabajar para que juntos salga Venezuela hacia delante, dijo la gerente de compras de un reconocido supermercado.
Los expendedores de alimentos dijeron que apoyan los días de duelo pero que también esto trae pérdidas para sus negocios, ya que por ausencia de compradores deben cerrar más temprano para no exponerse a la delincuencia. Lo importante es ofrecer siempre a nuestros clientes productos de excelente calidad y todo lo que la familia barquisimetana necesita, dijo un comerciante.
Los supermercados de la carrera 21 lucían en su mayoría cerrados o con una moderada presencia de consumidores comparados con días anteriores que se observaba una afluencia considerable.
Muchos comercios tenían banderas a media asta. La cara que lucía el centro de Barquisimeto era como de un domingo o día feriado. También circulaban pocas unidades colectivas por las calles de la ciudad. Así mismo, se observó una fuerte presencia de vigilancia, tanto de funcionarios de los cuerpos policiales municipal y nacional.
Por otra parte, se notaron comerciantes informales en las cercanías de los establecimientos comerciales que decidieron bajar sus santamarías.
Los gerentes de compras de los supermercados del casco central, informaron estar atentos a las necesidades más urgentes de los consumidores, sobre todo a la hora de ofrecer los alimentos de la cesta básica que escasean pero que con mucho esfuerzo tratan de tener en los anaqueles, sin necesidad de caer en la especulación o acaparamiento que tanto daño hace al ciudadano común.
Pasados los días de duelo, se espera que la situación comercial en la ciudad se normalice y las compras se eleven. La perspectiva por parte de los encargado de supermercados es la garantía de que el pueblo cuente todos los días con los alimentos necesarios.
