Fuerte, cargado de esperanza debe ser la orden del día y así de una forma pacífica conseguiremos soluciones a todos los problemas por fuertes que sean o aprender a ver el santo donde está el pecador y no lo contrario, ser parte de la solución y no del problema sin perder la responsabilidades y los derechos, bajar el ego, preferir la paz y no la razón para contribuir a una convivencia pacífica, en busca de una buena armonía, donde sea la forma de vivir y convivir, en el cual se respete los derechos que por ley nos correspondan y no se atropelle al más necesitado; como por ejemplo es el caso de los sectores : salud que debe ser y es una necesidad de primera, La educación en nuestro país está comprobada que es la peor del mundo y la más abandonada del planeta, esto es como contradictorio y no compagina con nuestra bella patria que ignorando la miseria sigue siendo la más linda y rica del mundo; esto está comprobado y aun hoy golpeada, pero como ningún país se acaba debemos estar convencidos y así minimizar la preocupación y reforzar la fe de que pronto vendrán las correcciones y alianzas por la recuperación y progreso, algo que no significa mayor esfuerzo, porque ya todo está hecho, lo que hay es que tratarlo con amor, ética, honestidad, decencia, respeto y apoyo a los que desean trabajar, invertir, que sea una ventana abierta a los inversionistas y no un cierre de oportunidades o espantarlos.
Es importante se tome en cuenta el sector productivo del campo, recordar que se constituye en la primera economía del mundo, por encima de todo siempre ha sido la agricultura y la ganadería, esto como un recordatorio a los que están convencidos de que el país se acabó; claro que no, lo que hay que buscar es alianzas, respeto y apoyo a los agricultores que producen el alimento sin preguntar quién lo consumirá, ni color, ni religión o partido al que pertenece o sea hay que darle un trato especial a ese sector y con el pensamiento puesto en una mejor nación.
Hacemos una invitación a los especialistas en poner trabas que no hacen ni dejan hacer, que se den un paseo por los estados agrícolas, es el caso por nombrar alguno el Estado Portuguesa y vean con ojo de hacedor y buen venezolano el potencial por los cuatro costados, esas sabanas como un verde jardín de sembradío de maíz y otros rubros, los rebaños de ganados pastoreándolos , como un ejemplo de prosperidad que si se puede; lo vi la pasada semana y me hizo muy feliz y convencido de que hay que hablar menos y trabajar más; y buscar la forma de pedirle al espíritu Santo nos ponga a un Alejo Hernandez en cada estado; hay mucho que hacer y lo que hay es que salir del montón y convencerse así mismo que uno es edición especial.
Ahora más que nunca el campo es la solución, unidos todos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país.
José Gerardo Mendoza Duran