“La migración venezolana se ha convertido en la segunda crisis de desplazamiento externo de mayor magnitud en el mundo”, advirtió el Comisionado Presidencial para las Naciones Unidas, Miguel Pizarro, quien aseguró que detrás de la cifra se encuentran cientos de personas forzadas a huir de sus hogares por pobreza extrema, violencia, inseguridad y persecuciones.
El Observatorio de la Diáspora Venezolana, afirmó que el éxodo venezolano no se detiene; en cambio, 1400 personas continúan migrando diariamente. Adultos, jóvenes y niños salen de Venezuela en dirección a países vecinos, muchos con extrema necesidad de asistencia.
Pizarro citó el informe “Tendencias Globales del Desplazamiento Forzado en 2021” de la ACNUR, el cual determinó que países de la región de las Américas acogió a más de 5,1 millones de personas desplazadas a través de las fronteras, de las cuales el 86% eran venezolanas.
“A pesar de que los venezolanos constituyen la segunda población más grande desplazada, aún somos muchos los que seguimos trabajando para que millones de venezolanos sean reconocidos como refugiados y no solamente migrantes, ellos huyen de un conflicto político y humano”, dijo.
El Comisionado reiteró que los venezolanos que huyen del país se encuentran en situación de vulnerabilidad y cuentan con muy pocos recursos, enfrentándose a vías de alto riesgo como el Tapón de Darién, sin seguridad alguna de contar con protección, alojo y comida en los países donde llegarán.
“Algunos países han iniciado procesos de regularización a gran escala para garantizar que las personas refugiadas y migrantes tengan acceso a servicios y derecho”, afirmó mientras reiteraba la necesidad de aumentar el apoyo logístico y financiero. “Es necesario seguir haciendo más”.