Nunca nuestro país había pasado por una situación parecida a la que ha tenido, en el curso de los últimos tres años, la educación, aunque su deterioro comenzó hace 22 años con el régimen y se ha venido agravando desde el año 2011.
Así, brevemente, lo describe Frank Andrade, director nacional de conflictos del Colegio de Profesores de Venezuela a Elimpulso.com.
La educación es un verdadero desastre, afirma, no sólo porque se ha introducido la ideologización socialista para igualar en la pobreza y bajar a la miseria a los educadores y a los educandos, sino porque ha sido descuidada totalmente y ha imperado la improvisación y el desorden desde las directrices de los funcionarios de los ministerios, cuyos titulares no han sido idóneos sino activistas partidistas.
Copia
¿Cuáles son las principales observaciones que tiene el Colegio de Profesores de Venezuela?
-Se ha copiado el modelo comunista cubano, en el cual impera la ideologización y no la calidad de la educación. Pero, con el agravante de que aquí no hay una estrategia de planificación en relación con el país, motivo por el cual no se han diseñado planes de estudios destinados a formar buenos estudiantes. Éstos han perdido el tiempo con una educación deficitaria, a la cual se añade la pandemia china que paralizó las actividades durante, prácticamente, tres años.
Abandono
-Pero, le decimos, la pandemia comenzó en el 2020.
Ya para entonces la educación venía muy mal. Al aparecer el virus del COVID-19, las autoridades suspendieron las clases y como no hallaban qué hacer improvisaron con un proceso a distancia, pero no tomaron en cuenta que los planteles carecían de tecnología para llevarlo a cabo. Las clases por televisión fracasaron porque fueron mal concebidas y con individuos que no sabían comunicar, ni mucho menos estaban preparados para llevar a cabo un programa educativo de emergencia. Los estudiantes necesitaban orientadores, aparatos de televisión y teléfonos inteligentes. Sus padres, que ya se encontraban en la pobreza por el sistema de gobierno que suprimió todas las reivindicaciones alcanzadas por los trabajadores, no tenían disponibilidades para ayudar a sus hijos, porque lo primordial era conseguir lo mínimo para la alimentación de las familias. Y se produjo el fracaso porque éste estaba ya concebido en la improvisación con que se actuó.
Los planteles fueron dejados al abandono al aparecer la pandemia. Debido a la falta de vigilancia, los delincuentes aprovecharon la circunstancia y se llevaron todo lo que había en sus instalaciones. No sólo cargaron con los útiles de cocina, sino las instalaciones de los baños, los cables eléctricos y, en fin, no dejaron nada para que cuando se restablecieron las clases, los alumnos pudieran contar con lo que habían dejado y los educadores, en su mayoría, desertaron por las pésimas condiciones en que se encontraban, aunque desde hacía ya tiempo venían apartándose de sus actividades por los malos salarios.
Deserción
¿Cuántos desertaron?
Más de doscientos mil educadores, según las informaciones que hemos podido tener en el Colegio. La mayoría de ellos se fueron del país al exterior. Y los que se quedaron se dedicaron a realizar diferentes labores, como zapatería, elaboración de alimentos, buhonería, entre otros oficios, porque de esa forma podrían paliar la situación de sus familias.
Si eso ocurre con los educadores, también se produjo una enorme deserción escolar. Porque no hubo estímulo alguno para el estudio.
¿Y cuando se restablecieron las actividades?
Nada cambió. Ahí están los planteles derruidos, todavía muchísimos están cubiertos por la maleza, con paredes y techos en malas condiciones, funcionando con dificultades porque no han sido reconstruidos los baños y carecen de comedores, que eran una forma de atraer a los alumnos porque a falta de comida en sus casas, se les suplían algunos alimentos en los planteles.
La falta de educadores también ha sido notoria, porque el número que abandonó las actividades no ha podido ser resuelto.
Pero, ¿no fueron incorporados los muchachos de la chamba juvenil?
En primer lugar, esos muchachos no tenían vocación para impartir clases; en segundo término, no estaban preparados porque no es fácil formar educadores, ya que éstos deben cursar sus estudios en una universidad o instituto pedagógico, y no en plazas; y como tercer punto, esos voluntarios lo que buscaban era una remuneración aceptable, que no les ofrecía el Estado. Y, por lo demás, ¿qué van a enseñar si no saben lo que van a hacer? También ese reclutamiento no dio resultado, porque también los “chambistas» desertaron. De modo, pues, que eso fue un fracaso porque la improvisación en el campo educativo no funciona.
Salarios
¿No ha venido diciendo el gobierno que con las tablas elaboradas por la Oficina Central De Planificación mejoraron en mil 800 por ciento los salarios de los educadores?
-Los ingresos de los educadores han sido reducidos desde que comenzó este régimen, ya que para entonces un profesor universitario devengaba, en promedio, 2.400 dólares mensuales. Para el año pasado, lo que percibía un docente universitario eran 11 dólares. Y ahora no pasa de los 100 dólares más 45 bolívares como bono. Con ese monto, ¿cómo puede vivir un profesional que se ha preparado para servir a su país? Hay que recordar que en el 2011 se acabó con la homologación salarial en la educación. Y ha sido progresivo el deterioro del sueldo.
Casi a finales de marzo de este año se produjeron las tablas, que fueron elaboradas por la Onapre.
Porque si a ver vamos, lo que ha pretendido este gobierno socialista es igualar a todo el mundo en la pobreza y llevarlo al extremo de la miseria.
Es por eso que no sólo es un desastre la educación, sino también la salud, ya que la gente muere porque los hospitales carecen de todo.
Tengo conocimiento de educadores que se han ido del país porque aquí no podían encontrar los medicamentos, ya que éstos son sumamente costosos y a donde fueron recibieron tratamiento gratuito y pudieron salvarse. Con el virus chino son incontables las personas, incluyendo docentes, que han muerto. Y digo incontables porque las cifras que suministra el gobierno no son confiables, porque en las mismas no aparecen los fallecidos que han sido tratados en sus casas y no pudieron sobreponerse a la enfermedad.
Volviendo al asunto del salario puedo decir que cuando se produjo el incremento de este año, algunos educadores que habían abandonado sus actividades, trataron de incorporarse, pero las autoridades del gobierno lo impidieron, alegando que habían abandonado sus cargos. ¿Y cómo no los iban a abandonar si no les alcanzaba para nada?
Futuro oscuro
-Usted dice que lo peor ha ocurrido en los últimos tres años. ¿Cuál es el futuro de la educación?
Oscuro. Porque la educación que se ha venido impartiendo es de tan mala calidad que se están promoviendo, al estilo cubano, a los estudiantes sin presentar exámenes. Incluso, sin haber asistido a clases. Y son muchísimos los que salen del sexto grado y no saben hacer las operaciones matemáticas, porque no aprendieron a sumar ni multiplicar, ni a restar ni a dividir. Esos mismos son los que van a ir al bachillerato, pero les resultará difícil ingresar a las universidades porque no fueron bien preparados. Sin contar con los que han venido desertando de la primaria porque no pudieron seguir yendo a los planteles por falta de útiles o por vivir en situación de extrema pobreza.
En estos momentos no pasan de doscientos los estudiantes que se han inscrito para estudiar y llegar a ser docentes.
No tiene un buen futuro la educación en Venezuela a menos que esto cambie drásticamente y este socialismo sea sustituido por una democracia.
Porque lo que estamos viendo da tristeza. Liceos con capacidad para un mil o más alumnos, están, prácticamente, solos porque apenas están asistiendo unos 120 ó 150 estudiantes. Y, por supuesto, muy pocos profesores por lo ya expuesto.
Un gobierno que le quitó todas las conquistas laborales a los educadores, que dejó en el abandono los planteles, que improvisó la educación porque puso activistas en los ministerios, no puede considerarse bueno para el proceso educativo. La ministro Yelitza Santaella llegó a ese cargo después de haber perdido la reelección a la gobernación de Monagas, pero ya antes lo había sido de Delta Amacuro y diputada porque es una activista del partido del régimen. Y así, por lo general, son las autoridades educativas, activistas políticos que, por supuesto, imponen su ideología al proceso educativo, que como ya lo dije, es muy malo.