Setenta privados de libertad, en etapa de ejecución, entre adolescentes y adultos de los sectores A y D, del Centro Socioeducativo Pablo Herrera Campins, en El Manzano, el cual alberga un total de 270, protagonizaron un motín a las 2:00 a.m. del lunes. Quemaron colchonetas y dañaron el sistema eléctrico de la institución, en rechazo a las requisas. Exigieron se incremente el número de familiares a la visita, ya que está prohibida la entrada de hermanas, y para oponerse a que se les brinde educación.
Lo expuso la directora del Saina, Maryeli de Tamayo, y agregó que estos hechos llevaron a una requisa el lunes en la mañana, por parte de PoliLara, en presencia de los jueces de Ejecución Tabani Bastidas y Jorge Díaz, de Barquisimeto y Carora, respectivamente; la fiscal 18 del Ministerio Público Alba Casanova, representantes de derechos humanos y Defensoría del Pueblo, así como la directiva de la institución para garantizarle los derechos establecidos enla Lopna.
Durante esa inspección se incautaron cargadores de celulares, dos teléfonos, dos chuzos de fabricación rudimentaria y dinero, acotó.
“Esto es un centro socioeducativo, no Uribana”, acotó.
Precisó que los heridos fueron suturados por las doctoras Yleana Guarenas, directora regional de Salud, y Lyll Montes, directora del Hcamp.
Determinó Tamayo que la directiva del albergue y las autoridades evaluarán los daños ocasionados para establecer responsabilidades.
Foto: Simón Alberto Orellana
