En un ambiente de profunda fe y devoción, la imagen de la Divina Pastora regresó este sábado 12 de abril a su templo en el pueblo de Santa Rosa, marcando el cierre de su visita número 167 a Barquisimeto.
Miles de fieles participaron en la procesión que partió desde la plaza Macario Yépez después de celebrarse la solemne misa de despedida en la iglesia Claret, y recorrió la avenida Lara hasta la iglesia de Santa Rosa, donde fue recibida con cantos, oraciones y una emotiva eucaristía.
Expresiones de fe marcaron el camino
Durante la procesión, los devotos manifestaron su fe de forma tradicional: niñas vestidas de pastorcitas, hombres, mujeres y niños ataviados como nazarenos, algunos cargando cruces o caminando descalzos como acto de penitencia y agradecimiento. Las calles se llenaron de alegría y espiritualidad mientras los feligreses cantaban y oraban durante el trayecto de la Virgen.
A las 4:00 de la tarde, se produjo el encuentro de la Divina Pastora con la sagrada imagen de Santa Rosa de Lima, en un emotivo acto que marcó la despedida de la patrona sentimental de los larenses de la ciudad de Barquisimeto al final de esta visita. Este momento fue acompañado por aplausos, lágrimas y cantos de los presentes, que vivieron el evento con profunda emoción
Vestida de cielo en el regreso a Santa Rosa
La imagen mariana lució un vestido de encaje, rasmir de seda y cristales, creado por el diseñador Douglas Tapia, quien expresó en sus redes sociales sentirse “sumamente honrado” por ofrecer este vestuario en una fecha tan significativa para la comunidad católica.
«Me siento sumamente honrado de vestir a la Divina Pastora en una fecha tan significativa. Un vestuario realizado con amor, dando gracias a Dios por la bendición de ofrecer esta pieza que encierra muchas intenciones, cifrado en la fe y la esperanza», escribió Tapia en su cuenta de Instagram.
Tres meses de fe y esperanza
La visita 167 de la Divina Pastora comenzó el 5 de enero con la tradicional solemne bajada de la imagen, seguida por la serenata ofrecida por la Orquesta Mavare y la multitudinaria procesión del 14 de enero, que reunió a más de 2,7 millones de personas, según cifras oficiales.
Durante casi tres meses, la Virgen recorrió más de 60 parroquias en Barquisimeto, llevando su mensaje de fe, consuelo y esperanza a los hogares de miles de fieles. El cierre de esta peregrinación marca un momento especial de reflexión y agradecimiento para la comunidad católica larense.
Con su retorno al templo de Santa Rosa, la Divina Pastora comenzará a recibir el cariño y la veneración de sus devotos, quienes la consideran símbolo de unidad, fe y protección espiritual para toda Venezuela.